El programa de Jesús Cintora ha acaparado titulares en las últimas semanas. Primero, por la forma en la que una de sus reporteras siguió a Mariano Rajoy antes de su declaración en el juicio sobre la conocida como 'caja B' del Partido Popular. Y segundo, por la escena que apareció en un momento del espacio informativo, en el que se apreciaba una playa sobre la que figuraba un cartel que decía: “Desfase de turistas en Madrid”.
Varios profesionales de RTVE han elevado el tono contra este programa –producido por Lacoproductora, de José Miguel Contreras- debido a su forma de tratar determinadas informaciones, que consideran que no es propia de una televisión pública. La audiencia tampoco ha respaldado a Cintora, que en marzo volvió a quedar detrás de sus rivales en Telecinco y La Sexta.
La cuota de pantalla de este magacín puede dividirse –y así lo hacen las páginas especializadas- en dos partes: por un lado, la que se registra antes del corte para la emisión del informativo territorial; y, por otro, la que se mide hasta el final del programa, cuando empieza el telediario de las 15.00 horas.
El máximo que ha logrado en la primera parte, durante los 30 primeros días de marzo, ha sido del 8,5% -15 de marzo-, mientras que el mínimo, del 6,2% -26 de marzo-.
La máxima y la mínima del segundo tramo ha sido del 7,9 -10 de marzo- y el 5,9% -3 de marzo-.
Jesús Cintora y la polémica
Sindicatos como UGT, USO y el SI rechazaron la contratación de este programa, al considerar que contradecía el Mandato Marco de RTVE, que obliga a que todos los contenidos informativos que se emiten en la televisión pública sean de producción propia.
Según reveló Rosa María Mateo en sus respuestas parlamentarias, el coste de cada edición de este espacio es de 60.661 euros, de los que RTVE paga a Lacoproductora 43.048 euros por capítulo.
Su audiencia ha sido generalmente inferior a la media de La 1, que en marzo volverá a marcar su mínimo histórico en este mes, que hasta ahora estaba en el 9,2%, en 2019. En 2020, fue significativamente superior (10,1%) debido al interés que concitaron en los espectadores las primeras semanas de pandemia de covid-19, en las que, entre otras cosas, se produjo el confinamiento de la población española.
Al contrario que varias de sus homólogas europeas, La 1 no fue la referencia en audiencia durante este período. Es más, durante el año pasado su cuota de pantalla batió su peor registro en varios meses.
El ejercicio 2021 no ha empezado mejor, pues, de hecho, el pasado febrero marcó el peor resultado desde su fundación, con una cuota de pantalla del 8,6%.
En su primera entrevista como presidente de la corporación, José Manuel Pérez Tornero, en La 1, ha incidido en que no hay que “dejarse seducir por la maximización de la audiencia” y ha apelado a aprovechar la que se logra a través de diferentes canales, no sólo por la vía de la TDT.