Las maltrechas cuentas de resultados de los bancos, ante la caída de la actividad en España, sufrirán una nueva sacudida con el tijeretazo a las comisiones por el uso de las tarjetas de crédito que prepara Bruselas y Economía quiere introducir en España a lo largo del próximo año. Las estimaciones del sector calculan en el entorno de los 400 millones los ingresos por comisiones que puede perder el sector con esta nueva normativa europea.
"El Gobierno tiene intención de aplicar esta normativa en cuanto sea aprobada en Bruselas. No más allá del primer semestre del próximo año", según confirman fuentes del Gobierno a este diario. Este mismo escenario confirmó, el pasado martes, Jaime García-Legaz, secretario de Estado de Comercio, pese a que no concretó calendario. "España aplicará cuanto antes la rebaja de comisiones bancarias", aseguró Legaz.
Esta nueva directiva limitará las comisiones a un porcentaje de entre el 0,20% (débito) y el 0,30% (crédito) de las operaciones, en función de su cuantía. En la actualidad, las comisiones por el pago con tarjeta en la UE son muy dispares: se sitúan en el 1,8% en Alemania, en torno al 0,75% en España y en cambio en otros países son prácticamente inexistentes.
El nuevo Reglamento, que necesita la aprobación del Consejo de ministros y del Parlamento Europeo para entrar en vigor, significará un ahorro para los consumidores europeos en el entorno de los 6.000 millones de euros, según los cálculos de Bruselas.
El sector bancario advierte que la rebaja de comisiones de pago podría traducirse en un incremento de las comisiones por emisión de tarjeta. Pero, desde Bruselas, se resta importancia a la amenaza. “Si pudieran subir las comisiones, ya lo hubieran hecho”, señalan fuentes comunitarias. Estas mismas voces recuerdan que en EE UU, donde ya se fijó un tope para las comisiones, los bancos también intentaron subir sus tarifas y tuvieron que renunciar ante las quejas de los clientes.
La normativa europea significará un ahorro para los consumidores europeos en el entorno de los 6.000 millones de euros
En los últimos trimestres, las entidades españolas han apostado por un aumento de las comisiones para lograr sostener sus cuentas de resultados ante la caída del margen de intereses, el verdadero indicador del negocio bancario. Este alza se ha traducido en los últimos balances facilitados por la Asociación Española de Banca (AEB). Si de enero a junio de 2012, las comisiones llegaron a una cantidad similar al 34,92% del margen de intereses de las mayores entidades financieras del país, en este primer semestre, esta relación ha subido hasta el 39,61%. Casi cinco puntos más con los que compensar la caída en el margen de intereses, principal indicador del negocio de los bancos.
Las seis mayores entidades del país (Santander, BBVA, CaixaBank, Bankia, Sabadell y Popular) lograron en el primer semestre del año un beneficio atribuido global por su negocio en España de 1.929 millones de euros, mientras que ingresaron por comisiones 3.788 millones. Es decir, las comisiones son casi el doble que las ganancias obtenidas en este periodo. La relación entre las comisiones y el margen de intereses ha cambiado por dos motivos. De un lado, el margen de intereses de los grandes bancos ha caído por la restricción del crédito y los bajos tipos de interés. Del otro, las comisiones suben un 0,53% porque las entidades están apostando por productos como los fondos de inversión o de pensiones ante las limitaciones puestas por el Banco de España a las retribuciones a los depósitos.
El incremento más espectacular se produce en el Sabadell, donde lo ingresado por comisiones en el primer semestre del año asciende hasta los 357 millones de euros, un 23,53% más que en el mismo periodo de 2012. La entidad catalana registra subidas en las comisiones de todos sus servicios bancarios, pero el alza en fondos de inversión (un 46,82% más) propulsa significativamente esta partida.
La nueva normativa europea únicamente fijará un techo para las comisiones de los pagos efectuados por tarjeta, pero no contempla ningún tipo de límite para las comisiones por las operaciones de retirada de efectivo en cajeros. Precisamente, estas operaciones son las que están dejando mayor margen para las entidades. Las comisiones llegan a alcanzar el 7% en función de la cantidad retirada.