Mariano Rajoy busca ministro de Economía entre varios nombres. Aún no hay una decisión tomada pues todo dependerá, entre otras cosas, del volumen de su previsible victoria en las urnas. Eso sí, ya ha dicho cuál debe ser una de las características esenciales del que asuma las riendas de la más complicada responsabilidad de la nueva legislatura: "que tenga capacidad de aguante para estar dispuesto a incinerarse conmigo", se le ha podido escuchar en conversaciones privadas.
El líder del PP es consciente de que la próxima legislatura va a ser una especie de prueba de resistencia aunque no parece dispuesto a hacer un Gobierno de transición. Necesita presentar un gabinete ministerial fuerte que lance un mensaje a Europa, a los mercados y al conjunto del país y con voluntad de permanencia.
2012 va a ser un año tanto o más duro que 2011. Hasta el ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, lo admitió abiertamente el pasado jueves cuando dijo que los datos del paro nos volvían a colocar en una situación similar a la del comienzo de la crisis. Desde el PP advierten que Gómez teme que los datos de desempleo de noviembre, diciembre y enero, a pesar del periodo navideño, no vayan a ser mejores que los catastróficos de octubre. A ello se une el desolador panorama europeo creado por el conato de rebelión del primer ministro griego Yorgos Papandreu. En definitiva, que la situación que pueden heredar no les permitirá alargar la celebración de su triunfo ante las urnas durante mucho tiempo.
El día 21, Rajoy deberá ir decantándose sobre uno de los nombres que baraja aunque dispondrá de algo más de un mes para formar Gobierno. Ha mantenido el mayor de los silencios al respecto, pero ha esbozado entre los suyos una especie de retrato-robot. El elegido debe ser un experto económico, --pero, eso sí, más práctico que teórico--, conocer la política europea, dominar idiomas y ser alguien con autoridad que sepa moverse en los grandes foros internacionales. Además, busca de él que alcance acuerdos con otras fuerzas políticas. La pretensión de Rajoy es acordar las grandes medidas económicas, como la reforma del mercado laboral o de los convenios colectivos, al menos, con CiU, independientemente de que tenga mayoría absoluta.
El PSOE da de superviviencia a Rajoy una legislatura
El modelo que busca aleja a su hasta ahora responsable de Economía, Cristóbal Montoro, de la ansiada vicepresidencia. Pocos son en Génova los que incluyen a Montoro en la lista de candidatos posibles para asumir esta tarea, sin descartarle del todo. El resto del equipo económico del PP tiene en contra su juventud aunque hay quien no descarta que personas como Álvaro Nadal o Fátima Báñez pudieran ocupar otras carteras como Trabajo.
Para Montoro no dejaría de ser una situación complicada después de haber estado al pie del cañón en esa travesía del desierto que ha durado ocho años. Sus compañeros de partido esperan que el líder del PP le busque un buen encaje.
La pretensión de Rajoy es aguantar toda la legislatura con el mismo equipo ministerial aunque les alcance esa "incineración" de la que habla en conversaciones privadas. De hecho, desde el PSOE transmiten la idea de que la crisis económica no sólo se les llevará a ellos por delante el próximo 20-N sino que hará lo mismo con Rajoy y los suyos. Los socialistas lo apuestan todo a la legislatura 2015-2019, convencidos de que el PP no resistirá ocho años en el poder.
