ACS profundizará en su proceso de diversificación con la entrada en un nuevo sector: el de la seguridad. El grupo que preside Florentino Pérez se adentrará en un área que se encuentra en auge en plena crisis, cada vez con más actores y cada vez más reclamado, en especial por las administraciones públicas.
La compañía se ha apoyado para su entrada en seguridad en Clece, una de las empresas que compone el área de medio ambiente de ACS. Así, el grupo acaba de crear Clece Seguridad, destinada a dar el correspondiente servicio sobre todo en edificios, ya que la filial de ACS se centra en la prestación de servicios globales en determinados inmuebles.
El de seguridad es uno de los sectores en pleno auge en la actualidad y lo seguirá estando principalmente por el papel que están tomando las administraciones públicas en general como contratistas. Al menos, entre las expectativas del sector se encuentra que los organismos públicos incrementen su demanda.
Uno de los llamados a demandar un mayor volumen de servicios de seguridad es el Ministerio de Justicia, donde acaba de aterrizar como máximo responsable Alberto Ruiz-Gallardón, con quien Florentino Pérez mantuvo una extraordinaria relación cuando el primero ocupó los cargos de presidente de la Comunidad de Madrid y alcalde de Madrid.
Justicia, gran animador del sector
De hecho, Justicia es uno de los departamentos que se plantea la sustitución en algunas de sus dependencias de miembros de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado por personal de seguridad privado, una circunstancia que ya se había empezado a dar en otros ministerios.
Con este escenario, ACS entra en un sector por el que todavía no había apostado en su proceso de diversificación. Además, lo ha hecho a través de un filial como Clece que en su día estuvo en venta pero para la que no ha encontrado un comprador que haya podido conseguir la financiación para cerrar la operación.
El grupo puso en venta íntegramente su división medioambiental para tratar de reducir su elevado endeudamiento, aunque de las tres empresas que la componen tan sólo ha sido capaz de colocar en el mercado la más pequeña, la antigua Dragados SPL (actualmente denominada Noatum).
Mientras, Urbaser, cabecera de la división, prosigue dando alegrías al grupo. En las últimas tres semanas, la división se ha hecho con dos grandes contratos de tratamiento de residuos en Reino Unido, de la mano de la compañía local Balfour Beatty. ACS ha firmado dos grandes contratos con una duración de 28 años y valorados en términos globales en el entorno de los 1.500 millones de euros.