Joaquín Regidor García, así se llama el ingeniero agrícola y agricultor de profesión, que ha defendido que la ley es necesaria y urge su puesta en marcha. Hoy ha comparecido en la Comisión de Fomento que estudia la nueva ley de regadío propuesta por PP y Vox y ha manifestado su claro apoyo a la misma. Joaquín tenía dos hectáreas en Lucena del Puerto heredadas de su abuelo. Solicitó ayudas en 2004, en 2007 y pasó todas las inspecciones en 2009. En 2014, con la ley de la Corona Norte, se queda fuera y le notifican dos expedientes sancionadores en 2018. Actualmente tiene alquilada una finca de 3 hectáreas en Cartaya.
Vozpopuli ha querido conocer de cerca la historia de Joaquín Regidor y el por qué de su sí sin fisuras a esta ley que está dando tanto que hablar, suponiendo además una batalla con fines electoralistas y sin pensar en los agricultores. Esta ley es la solución a todos aquellos que como yo, nos vimos afectados en 2014.
Mi caso es uno de ellos, pero el del otro chico que ha expuesto hoy, Javier, también. “Es la solución y no es un problema, porque agua en la provincia de Huelva hay, y ha quedado comprobado en las comparecencias de hoy”.
Desde 2014 Joaquín fue a la Delegación de Medio Ambiente varias veces y las respuestas fueron pocas, en la ortofoto de junio de 2004 su parcela no aparecía por tanto ,perdió su derecho a agua como los demás. Las ayudas las solicita en la misma fecha, en junio de 2004, y se las concedieron. “Si no pasas la barrera de la foto de junio de 2004 no tienes derecho a nada”. De hecho, “mi finca en el sigpac, una plataforma en la que se basan para ver si las fincas son o no de regadío, aparece como de regadío, el 80 % lo era”.
Con respecto a otros agricultores Regidor ha asegurado "No digo que todos los agricultores estemos en la misma situación, pero una gran parte, sí. Sobre las palabras de la jefa de la oficina de Ordenación del Territorio de Huelva en la Comisión asegurando que se siguió un criterio arbitrario del plan de 2014, Regidor afirma “No conozco el criterio pero creo que cuando se hace un plan tan ambicioso como éste, y que se hayan cometido errores, dejando a fincas y familias detrás, creo que debemos mejorarlo y corregirlo”.
Para finalizar Joaquín Regidor sigue aún sin explicarse como pasó de ser un agricultor apoyado por la Administración andaluza a convertirse en un delincuente. “En 2002, 2003, 2004, el PSOE nos incentivó que entráramos a cultivar en el campo. Al principio estaba todo perfecto y de la noche al día fui un delincuente”.
Este agricultor lucense, tuvo que dejar la finca que heredó de su abuelo en su pueblo y se instaló en Cartaya. “Una finca no se monta tan fácil, he hecho una vida en ella, hay que montar muchas cosas, muchas inversiones, y con la denuncia –después de ayudarme, promocionarme, darme ayudas para que me instalara aquí¬- me dicen que abandone y empiece una vida nueva a 50 km de mi pueblo. A parte de ser duro es una incongruencia. Primero, me ayudas, y luego soy un delincuente”.