Un exdirectivo del Instituto Nóos, Antonio Ballabriga, quien dirigía distintos proyectos en la entidad, ha confirmado este jueves en su declaración como testigo en el juicio del caso Nóos que Iñaki Urdangarin continuó dando órdenes después de abandonar la asociación, en marzo de 2006, por recomendación de la Casa Real.
Tal y como ha manifestado a preguntas del fiscal anticorrupción Pedro Horrach, "las instrucciones que me dieron es que debía informarle de los avance y progresos del proyecto de los Juegos Europeos", una iniciativa por la que Nóos percibió 382.203 euros de la Generalitat Valenciana a pesar de que finalmente no se llevó a cabo.
Ballabriga, quien formaba parte del comité de dirección del Instituto, ha señalado que tras marzo de 2006 "le mantuvimos informado y en alguna decisión él participó". "Estuvo perfectamente informado", ha remarcado.
Respecto a los Juegos Europeos, ha recordado que mantuvo una reunión con el exvicesecretario de Estudios del PP y exconseller de la Generalitat Esteban González Pons. Precisamente, Diego Torres afirmó en el juicio, al recordar quiénes intervinieron en las negociaciones iniciales del proyecto, que "una persona muy involucrada" en las mismas fue el ex alto cargo del PP.
Ballabriga ha testificado en la mañana del jueves, horas antes de que lo haga Miguel Tejeiro, en el juicio por el caso Nóos. El miércoles estuvo ante el tribunal Luis Tejeiro, su hermano y asesor contable del Instituto Nóos, que confirmó la presencia de empleados ficticios.