Los conductores de programas de Prisa Radio, compañía que tiene como referencias la Cadena Ser y Los 40 Principales, van a ver reducido su sueldo un 15 por ciento como consecuencia de las últimas medidas de ahorro puestas en marcha por la matriz del Grupo, según explican fuentes de la compañía que hace un mes alcanzó un acuerdo con los bancos para refinanciar su deuda financiera.

Este ajuste llega después de que se haya cerrado plazo para la ejecución de un ERE en la Cadena Ser que ha supuesto la salida de 188 profesionales, de los cuales 7 eran directivos. No obstante, hasta el próximo 31 de marzo no finaliza el período en el que los trabajadores de las emisoras de Prisa pueden acogerse con incentivos a la regulación de empleo, según fuentes del sector. En este sentido, entre otras medidas que implementará próximamente, Prisa ha propuesto una rebaja general del 7% en las nóminas de todos los directivos de la casa, un ajuste que será voluntario. Este tipo de ahorro no es nuevo en Prisa. En 2009, negoció con los representantes sindicales de sus empresas una reducción del 8 por ciento del sueldo que se aplicó desde julio de ese año y se prolongó hasta finales del 2010.

La compañía de la que es consejero delegado Juan Luis Cebrián continúa así con la estricta dieta de adelgazamiento de gastos en la que está inmersa desde hace más de dos años. Hasta la fecha, acumula una creciente deuda que lastra sus cuentas: más de 3.500 millones de euros, según ponen de manifiesto fuentes del sector. Prisa concluyo a finales de 2001 la refinanciación de su deuda, que engloba un préstamo sindicado de 19 de mayo de 2006, el crédito puente de 20 diciembre de 2007, el préstamo subordinado de 20 de diciembre de 2007 y una serie de préstamos bilaterales.

Warrants por importe de 150 millones
A finales del pasado mes de octubre, el presidente de la Comisión Ejecutiva del consejo y consejero delegado, Juan Luis Cebrián, aseguró que la "prioridad" en ese momento era "cerrar con éxito el proceso de refinanciación de la deuda de la compañía", para lo que el grupo había presentado una propuesta de refinanciación a los bancos que contemplaba como elemento fundamental la intención mostrada por los accionistas de referencia agrupados en Timon junto a Nicolas Berggruen y Martin Franklin de ejercitar 75 millones de warrants por un importe de 150 millones de euros.