La Guardia Civil estudia la posibilidad de compensar con unos 1.200 euros brutos a los agentes que renuncien a sus vacaciones de verano por la falta de efectivos, aunque la decisión aún no ha sido tomada.
Según han indicado las asociaciones de guardias civiles JUCIL y AUGC, se trata de una propuesta que pretende ser un "proyecto piloto" consecuencia "de la falta de guardias alumnos en prácticas en unidades este verano".
Los agentes que se apunten, si al final se acuerda, recibirían una compensación económica de 1.188 euros brutos, y las fechas serían entre el 15 de junio y el 15 de septiembre.
"Esta medida extrema, que todavía no sabemos qué respuesta tendrá por parte de los guardias civiles, refleja eso sí la gravedad de la situación y el nivel de presión al que estamos sometidos en nuestras tareas diarias los guardias civiles, con turnos que en ocasiones se extienden o con dobletes en la misma jornada", ha subrayado en un comunicado recogido por Europa Press el secretario general de Jucil, Ernesto Vilariño.
Mientras, la AUGC cree que la propuesta "es un nuevo reflejo de la caótica política de personal de la Dirección General de la Guardia Civil: los guardias civiles se encuentran ya en estas fechas realizando sus peticiones de vacaciones de verano, y ahora con esta medida improvisada, ven una vez más penalizada su conciliación laboral y familiar".