Una vez detenidos la madre y el padre de los dos menores hallados muertos en Godella (Valencia), el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Paterna ha asumido la investigación y ha decretado el secreto de las actuaciones. Ella llevó a los agentes a la zona en la que estaba sepultados los cuerpos, él se mantuvo en la vivienda e indicó a la Policía Local y a la Guardia Civil que los niños estaban muertos.
Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV), la causa queda abierta por dos delitos de homicidio. La noche de este jueves se hallaron los cuerpos cerca de la casa okupada en la que vivía la familia. El niño tenía tres años y medio y la niña tenía seis meses.
Tras el hallazgo, el juez autorizó el levantamiento de los cadáveres y su posterior traslado a dependencias del Instituto de Medicina Legal. Mientras se emite el resultado de las autopsias correspondientes, el magistrado ha incoado un sumario por dos delitos de homicidio, aunque posteriormente podría cambiar la calificación de los delitos.
Los resultados de la autopsia determinarán el motivo del fallecimiento que hasta ahora no ha sido concretado por la Guardia Civil, a cargo de las pesquisas. Fuentes de la investigación han asegurado a Europa Press que, previsiblemente, los padres de los menores pasarán a disposición judicial este sábado. Hasta el momento, ninguno de los dos a confesado la autoría del crimen.
