La directora de la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD), Mar España, ha afirmado que su organismo tiene "tolerancia cero" ante la difusión de vídeos íntimos de terceras personas sin su consentimiento y ha advertido de que quienes compartan ese contenido tendrán "consecuencias penales".
"En internet no hay anonimato", ha dicho ante los periodistas Mar España tras inaugurar un curso sobre protección de datos que dirige esta semana en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, en Santander. También ha señalado que se tarda "milésimas de segundo" en un reenvío y ha lamentado que esa difusión "puede suponer el suicidio de una persona y que una persona se quede marcada de por vida".
Ante esta conducta, España ha recordado que "hay responsabilidad penal, administrativa, de protección de datos y civil" para quienes compartan el contenido. "Tanta responsabilidad es del que graba y envía una relación sexual consentida en su momento", como aquellos que "lo saben y contribuyen a esa cadena de reenvíos y a que esas imágenes se hagan virales", ha asegurado la directora de la Agencia de Protección de Datos.
Una herramienta contra la difusión de estos archivos
"Basta ya", ha pedido Mar España ante esas conductas y ha añadido que la Agencia cuenta con una herramienta para retirar las imágenes que es exitosa "en el 90 % de los casos". "No hay ni que identificarse, basta con que nos dé un pantallazo de qué audios, qué videos, qué imágenes, qué contenidos y en redes, en qué blog, en qué buscadores de internet se están vertiendo", ha explicado.
La Agencia Española de Protección de Datos ejecuta, en menos de 24 horas, una orden cautelar para "la retirada urgente de esos contenidos", una herramienta que ha pedido "difundir". "Que nunca se quede una víctima sin saber que puede acceder a la Agencia", ha señalado.
Además, España ha incidido en la prevención para tratar de evitar que se difundan vídeos e imágenes íntimas. "Todos tenemos que ser conscientes", ha dicho. Además, ha priorizado la necesidad de atención del impacto de estas tecnologías en la adolescencia “: una generación donde cada vez su identidad es más importante en el mundo digital que en el mundo real".
