España

Vox condiciona su apoyo a los presupuestos en Baleares al pin parental y la Oficina de Libertad Lingüística

La formación "cree que se llegarán a un acuerdo en la mayoría de los casos", puesto que "no son líneas rojas"

  • La portavoz de Vox en el Parlament, Manuela Cañadas. -

Vox espera "llegar a acuerdos" con el PP sobre la implantación del pin parental en Baleares y la creación de la Oficina de Libertad Lingüística para aprobar el techo de gasto y, posteriormente, los presupuestos autonómicos.

La portavoz de Vox en el Parlament, Manuela Cañadas, ha alegado, en la rueda de prensa anterior pleno de la Cámara autonómica de este martes, que el debate de estas cuestiones se abordará con "calma", "responsabilidad" y "sin amenazas" por el "bien de todos los baleares".

Cañadas ha explicado que Vox, a nivel nacional, expuso ocho puntos fundamentales sobre los que pivotarían las negociaciones de los presupuestos autonómicos y ha vaticinado que "cree que se llegarán a un acuerdo en la mayoría de los casos", puesto que "no son líneas rojas".

Asimismo, ha manifestado que la voluntad de Vox es aprobar el techo de gasto para "dar seguridad" al Govern y después comenzarán las conversaciones por las cuentas públicas que requieren de una "mayor negociación".

"Situación insostenible"

La representante ha mencionado la querella anunciada por Vox, ante el Tribunal Supremo, contra la presidenta del Congreso, Francina Armengol, por las últimas informaciones conocidas de las conversaciones intervenidas por la UCO en la investigación del 'caso Koldo'.

A la expresidenta del Govern le ha acusado de "mentir en sede parlamentaria" y ha pedido que dé explicaciones, mientras que ha señalado que el Gobierno central está en una "situación insostenible" por la "corrupción sistemática que se extiende a todo el territorio familiar y político" del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

Por otro lado, Cañadas ha anunciado la presentación de una proposición no de ley (PNL) para reivindicar la libertad de prensa por los "últimos hechos ocurridos en la sala de prensa del Parlament y las medidas impulsadas por el Gobierno para acallar a las voces críticas".

"Los intentos de coacción y menosprecios de representantes políticos no tienen cabida en las ruedas de prensa", ha defendido la parlamentaria.

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