El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha anunciado este jueves que las fuerzas francesas han "neutralizado" al líder del grupo terrorista Estado Islámico en el Gran Sáhara (ISGS) , Adnan Abu Walid al Saharaui.
Así lo ha indicado Macron a través de su perfil de Twitter, si bien no ha dado más detalles respecto al operativo, el cual ha calificado como "otro gran éxito" de Francia en la "lucha contra los grupos terroristas en el Sahel".
"Francia piensa esta noche en todos sus héroes que murieron por Francia en el Sahel en las operaciones 'Serval' y 'Barkhane', en las familias desconsoladas y en todos sus heridos. Su sacrificio no es en vano. Con nuestros socios africanos, europeos y americanos, continuaremos esta lucha", ha añadido el presidente francés.
La filial de Estado Islámico en el Sahel se creó en marzo de 2015, en pleno momento de expansión del 'califato' que había proclamado Abú Bakr al Baghdadi en junio de 2014 y tiene su área de operaciones en la zona de las tres fronteras o Liptako-Gourma, donde confluyen Malí, Burkina Faso y Níger.
Adnan Abu Walid al Saharaui, hasta ahora líder del grupo terrorista, es de origen saharaui. Nació en El Aaiún, en el Sáhara Occidental, pero él y su familia se trasladarían posteriormente a los campos de refugiados en Tinduf, en Argelia. Aquí, entró a formar parte del Frente Polisario, si bien no hay información sobre su vida en los años 1990 y el inicio de los 2000.
Terrorismo en el norte de Mali
En torno a 2012, entró a formar parte del Movimiento para la Unidad y la Yihad en África Occidental (MUYAO), cuyos fundadores años antes habían sido antiguos miembros de Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI) que querían crear una unidad compuesta de combatientes árabes del norte de Malí.
Al Saharaui llegó a ser portavoz de MUYAO, hasta que en agosto de 2013 se anunció la fusión de este grupo con el comandado por el célebre yihadista argelino Mojtar Belmojtar, creando así Al Murabitún.
Cuando en 2015 Al Saharaui, de forma unilateral, jura la lealtad del grupo a Estado Islámico, Belmojtar rompe con él y mantiene su lealtad a Al Qaeda. En ese momento, es cuando ve oficialmente la luz Estado Islámico en el Gran Sáhara. Al Saharaui es responsable de ataques mortales contra decenas de civiles y fuerzas de la región.