Corea del Norte ha abolido una serie de leyes para la cooperación económica con el Sur, según informaron hoy medios estatales, en lo que supone otro gesto que profundiza el empeoramiento de los lazos entre ambos vecinos.
La decisión, que afecta a la ley de cooperación económica Norte-Sur y a la ley sobre la zona especial para turismo foráneo en el monte Kumgang, se adoptó de manera unánime en una reunión plenaria del comité permanente de la Asamblea Popular Suprema (Parlamento), según informó hoy la agencia estatal KCNA.
La primera de las normas se considera una ley marco para la cooperación económica transfronteriza, mientras que la segunda afecta al complejo turístico del monte Kumgang, donde la empresa surcoreana Hyundai Asan poseía importante inversiones inmobiliarias.
El complejo del monte Kumgang, situado en el sureste de Corea del Norte, funcionó durante algunos años como un lugar visitado por turistas sureños hasta que una mujer surcoreana falleció a causa de los disparos de dos soldados del Norte en 2008.
El recinto no volvió a acoger desde entonces a más grupos de turistas del Sur y desde 2019 el régimen norcoreano ha procedido a expropiar varios activos de Hyundai Asan.
La abolición de estas leyes llega un mes después de que Corea del Norte desmantelara varios organismos encargados de asuntos transfronterizos (entre ellos, uno encargado de gestionar el programa turístico en Kumgang) y de que el líder Kim Jong-un asegurara que el Sur es el principal enemigo de su país y que la reconciliación y la reunificación son ya imposibles.
Desde entonces, Pionyang ha realizado ejercicios con artillería junto a islas surcoreanas en la tensa y disputada frontera marítima intercoreana occidental y realizado seis pruebas de armas de destrucción masiva, entre ellas, cuatro test de misiles de crucero.
Hoy mismo, día en que se celebra el 76 aniversario del ejército norcoreano, los medios nacionales instaron a seguir reforzando la preparación y el poderío militar para plantar cara a un posible ataque externo.
En uno de los editoriales publicado hoy por el diario Rodong se afirma que el ejército está decidido a "devastar por completo" a las fuerzas hostiles si se les ocurre atacar el país.
Tras el fracaso en 2019 de las negociaciones sobre desnuclearización con EE.UU., Corea del Norte ha apostado por modernizar su armamento, rechazar ofertas de diálogo y acercarse más a Pekín y Moscú, con quien ha intercambiado armas, mientras que Seúl y Washington han reforzado sus mecanismos de disuasión y su cooperación militar lo que ha llevado a la península a nuevas cotas históricas de tensión.