Por fin el Gobierno soluciona un embrollo que duraba demasiado tiempo. Y, contra pronóstico, pagará un coste que parecía destinado a los usuarios. La reordenación de los canales de Televisión Digital Terrestre (TDT) para dejar espacio radioeléctrico a nuevos servicios móviles afectará a casi un millón de edificios residenciales y costará 286 millones. Estaba previsto que el Ejecutivo aprobase en septiembre sus planes adelantados en julio, pero las dos grandes novedades son que ya hay una cifra de coste y, aún más importante, que correrá a cargo del Estado. Así lo ha anunciado este viernes el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
El Gobierno aprobará próximamente un real decreto "que establezca los procedimientos para que estas ayudas del Estado" lleguen a las comunidades de vecinos
En total, el 55% de los hogares españoles, 998.000 edificios residenciales colectivos, tendrán que resintonizar sus antenas para continuar teniendo "el 100% de cobertura" de la TDT, según ha detallado el ministro. Para sufragar este coste, que como se ha dicho asciende a 286 millones, el Gobierno aprobará próximamente un real decreto "que establezca los procedimientos para que estas ayudas del Estado" lleguen a las comunidades de vecinos.Además, esta normativa se acompañará por un plan de comunicación para que los televidentes afectados conozcan las actuaciones que tienen que emprender para la reantenización, ha recogido Efe.
Como estaba previsto, el Ejecutivo ha aprobado la puesta en marcha de un ambicioso plan de comunicación para llegar a todos los televidentes afectados y que mantengan la cobertura
Además del real decreto que aprueba el nuevo plan de televisión digital terrestre (TDT), el Consejo de Ministros ha aprobado un acuerdo en el que se incluyen las actuaciones necesarias para hacer posible el dividendo digital -la reorganización del espacio radioeléctrico para dejar espacio nuevos servicios de telefonía móvil 4G y banda ancha ultrarrápidas-. Se trata, más en concreto, de un plan de actuaciones para planificar las nuevas frecuencias dentro de toda la geografía nacional, que consta de 75 zonas geográficas. El Ejecutivo también ha aprobado un calendario de liberación del dividendo, que tiene que estar listo antes del 1 de enero de 2015 por mandato de la Unión Europea, así como la puesta en marcha de un ambicioso plan de comunicación para llegar a todos los televidentes afectados y que mantengan la cobertura.
Un gasto inesperado que justificar
¿Tendrá algo que ver con la decisión del Gobierno de hacerse cargo de los 286 millones la cercanía de diferentes procesos electorales? Solo el Ejecutivo lo sabe
El coste mencionado de 286 millones de euros resulta inesperado. El Gobierno ni siquiera había amagado con hacerse cargo de dicho coste. Por ello, para justificar este gasto no previsto, Soria se ha esforzado en recordar que el plan inicial preveía un coste de reantenización de 800 millones de euros, por lo que, según su versión, el objetivo del plan aprobado este viernes es tanto disminuir el coste total de la liberalización del dividendo digital, como garantizar toda la oferta televisiva nacional y autonómica que ahora mismo se está emitiendo y mantener e impulsar las actuales emisiones de HD. ¿Tendrá algo que ver con la decisión del Gobierno de hacerse cargo de la citada cantidad la cercanía de diferentes procesos electorales? Solo el Ejecutivo lo sabe.
En cuanto al impacto de este plan, ha apuntado que las televisiones deberán proceder a un cambio de frecuencias, para los ciudadanos habrá un plan "menos complicado" que el de 2010 con una disminución de costes y permitirá desarrollar la cuarta generación de 4G en la banda de los 800 mhz. Soria ha recordado que este plan emana de un mandato de la UE, pero que también está presente en la Ley de Economía Sostenible de 2010 y en un acuerdo de Consejo de Ministros de 2012 que finalmente fue anulado por la ya célebre sentencia del Tribunal Supremo que anuló nueve canales de TDT. Aunque tardó meses en hacerla cumplir, finalmente el Ejecutivo ordenó el cierre de canales en mayo.
Tal y como ha ido adelantando puntualmente Vozpópuli, con el cambio se pasará de los 10 actuales a 8 canales de múltiplex, cinco de los cuales serán para las privadas, uno y medio para TVE y el otro para las autonómicas. Algo que dará que hablar, y mucho, en un sector, el audiovisual, cuyos mandamases se sienten maltratados por el Gobierno del PP.
