El grupo estadounidense Ford está echando el cierre a tres fábricas en Europa, donde prevé ser rentable en 2015; Renault vende un 18,4% menos y está obligando a sus centros a trabajar más y cobrar menos... El panorama es desolador. El sector del automóvil está sufriendo la recesión de Europa y está obligando a los grupos constructores a reenfocar sus mercados hacia Asia y Estados Unidos.
En medio de esta situación, las marcas de lujo como Porsche pasan de puntillas sobre este caos europeo y consiguen batir sus propios records. El grupo alemán mantuvo sus ritmo de crecimiento de dos dígitos en Europa, su principal mercado. En los nueve primeros meses del años las ventas crecieron un 13,2%, hasta 34.656 unidades. Este crecimiento vino fundamentalmente por el tirón de Alemania, donde colocó 11.905 coches, un 14,2% más.
En China casi se venden más porsches que en Estados Unidos
El segundo mercado más importante de Posrchs es EEUU, pero está a punto de rebasarle China, con ventas de 24.982 unidades (22,1%), y 24.859 unidades (35,4 % más), respectivamente.
En todo el mundo, Porsche vendió 103.245 deportivos en todo el mundo hasta septiembre, un 20,2% más que el año anterior, por el éxito del Cayenne, el Panamera y el 911, que registraron un aumento de las ventas del 24,9, el 15,8 y el 39,8 %, respectivamente.
"En los nueve primeros meses de 2012, casi hemos logrado el resultado del pasado año, por lo que esperamos superar notablemente en el conjunto del año el récord de ventas, facturación y beneficio operativo de 2011", decía el director de Finanzas de Porsche, Lutz Meschke.
Gracias a estas cifras, la compañía aumentó la facturación un 28,1% (10.154 millones de euros), su margen de beneficio creció un 18,5% y la producción creción un 18,4% (111.076 unidades).
"Esto es un testimonio del gran atractivo de los deportivos y de la gran fuerza de atractivo de la marca Porsche", consejero delegado de Porsche AG, Matthias Mülle.