Tener aficiones y pasar tiempo disfrutando de ellas es necesario para el bienestar de las personas. Así lo aseguran los expertos que apuntan a la importancia de cultivar intereses personales que beneficien nuestra salud mental y emocional. Y es que, cualquier hobby que nos ayude a desconectar es positivo para relajarse y conseguir una satisfacción personal.
Cuando hablamos de entretenimientos o aficiones que ayuden a mejorar la salud mental, la mayoría pensamos en actividades como el yoga o la meditación, pero además, hay otras como la música, la danza o la pintura. Unas aficiones efectivas que nos ayudan a distraernos de nuestras obligaciones y nos ayudan a relajarnos. Pero no son las únicas.
Según un reciente estudio, hay una actividad que se consagra como una de las que mejor nos hace sentir. Se trata de coser, una afición que aporta numerosos beneficios para nuestra salud mental.
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Los beneficios que coser tiene para fortalecer la salud mental
Incluir la costura en nuestro día a día puede tener muchos beneficios para el cuerpo y la mente. Así lo asegura un estudio de la Universidad de Cardiff, en Reino Unido, que desvela cómo esta actividad favorece nuestro bienestar psicológico.
Según los investigadores, coser es una excelente terapia para fortalecer nuestra salud mental. Y es que tiene un beneficio similar al que provoca la meditación. Esto se debe a que al centrarnos plenamente en nuestras manos, entramos en un estado de plena concentración, como el mindfulness. De esta manera, nos alejamos del estrés diario y de nuestros problemas consiguiendo un efecto calmante que puede también notarse en la salud cardiovascular, consiguiendo que la presión arterial se reduzca.
La costura es una actividad a base de movimientos mecánicos, que pone a trabajar a nuestro cerebro de una manera bastante relevante. Los movimientos repetitivos de las manos activan los neurotransmisores, manteniendo a las neuronas activas. Pero esta actividad no solo mejora la capacidad de atención y memoria, según los expertos, también es útil para prevenir problemas como la atrofia cerebral asociada al envejecimiento, algo que la convierte en una herramienta para reducir el riesgo de desarrollar demencias en el futuro.
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Coser o tejer también ayuda a ejercitar la creatividad, manteniendo la mente ágil y promoviendo la regeneración de neuronas; y nos obliga a la concentración y a mantener el interés por la consecución de objetivos. Además, ayuda a trabajar la coordinación motora fina y es ideal para mejorar la psicomotricidad y la coordinación entre el cuerpo y la mente.
Se trata de una actividad perfecta para realizar a cualquier edad, pero los expertos la recomiendan especialmente en etapas avanzas por sus poderosos efectos terapéuticos.
Coser también puede ayudar a reducir el estrés y la ansiedad, ya que, al igual que otras actividades como el yoga o la meditación, facilita la relajación disminuyendo los niveles de tensión. Por eso, puede ser un gran aliado para mejorar la calidad del sueño.
Además, y aunque para muchos pueda tratarse de una actividad solitaria, la costura tienen un fuerte componente social. Son muchas las personas que se reúnen en talleres de costura para compartir ideas o técnicas, algo que fomenta la socialización. Por lo que coser no solo beneficia la salud mental, también puede incidir en la vida social y emocional.
