El cineasta Álex de la Iglesia hizo ayer en Madrid una doble presentación de la retrospectiva que le dedica el Festival de Cine Español de Nantes (Francia) y el libro-entrevista que ha editado la Filmoteca Vasca con el título de La pasión de rodar.

Allí, además de hablar sobre su carrera, tuvo palabras amables, demasiado amables para el Ministro de Educación, Cultura y Deportes, José Ignacio Wert, el hombre que dio luz verde al reglamento de la Ley de Economía Sostenible, la llamada Ley SInde, a la que tanto y tan mediáticamente se opuso el cineasta."Estoy convencido de que es una persona que sólo quiere hacer su trabajo lo mejor posible", ha concluido.

Después de salir airoso a las preguntas de la prensa, el ganador del Goya por El día de la bestia, hizo un repaso por su carrera. "Todos los directores intentamos que nuestra carrera parezca que tiene un criterio y un rigor, pero es mentira", ha dicho el realizador más iconoclasta del cine español. "Si hay que buscar un punto en común, diría que es el absurdo, la sensación de vacío que genera que las cosas no sean lo que deberían ser", remató.

El libro de entrevistas La pasión de rodar recorre su período como presidente de la Academia de Cine, su vida familiar y su novela Payasos en la lavadora, además de estar complementado con estudios sobre su obra y un detenido repaso a cada una de sus películas.

Mientras, en el Festival de Cine Español de Nantes, cuya 22 edición tendrá lugar del 15 al 27 de marzo, se proyectarán seis películas suyas en un homenaje a "un director ferpecto", anuncia el cartel del festival.

Acción mutante, 800 balas, Perdita Durango, Crimen ferpecto, Balada triste de trompeta y La chispa de la vida conforman el recorrido para un director que ha dicho de sí mismo: "No peco de excesiva humildad y creo que sí he hecho algo bien. He divertido algo".

Por ello, no teme reconocer que más que el cine de autor, sus referentes han sido "los Electroduendes, los anuncios, la absorción patética e inconexa de películas cuyos títulos -dice- no recuerdo, el fútbol de los domingos y, por supuesto, Pedro Olea, Paco Martínez Soria, Forqué o Camus", ha resumido.

Mirando su filmografía, pese a las diferencias de tono, de reparto o de enfoque, ha reconocido: "Todos intentamos hacer una única película y hacer cine significa corregirla una y otra vez", ha sentenciado.