Muchos son los que comienzan el día con una taza de té. Un saludable hábito que aporta numerosos beneficios a nuestra salud, y que se ha convertido en un gran aliado para adelgazar.
Originario de China, donde se han encontrado las primeras referencias a esta infusión, el té es considerado una de las bebidas más antiguas del mundo y cuenta con millones de adeptos que disfrutan del sabor de los diferentes tipos de té.
Aunque todos proceden de la misma planta, conocida como Camellia Sinesis, será la procedencia, la parte de la planta que se utilice o el proceso elegido el que determine qué tipo de té obtenemos.
Aunque son el verde y el negro los más conocidos, sobre todo este último por el famoso té inglés del 'English Breakfast' que se popularizó durante la época victoriana, existen otros tipos a los que merece la pena prestar atención.
Es el caso del té rojo, protagonista de una de las dietas que triunfan en la actualidad y cuya fama ha ido creciendo hasta convertirlo en uno de los más deseados por los amantes del té.
Propiedades del té rojo
Conocido también como té Pu erh, y procedente de la provincia china de Yunnan, este té se caracteriza por tener un sabor más dulce que el resto. El té rojo se elabora a partir de las hojas de la planta fermentadas en barricas (por un periodo de tiempo entre los dos y los 60 años), que le confieren su característico color.
El té rojo cuenta con interesantes valores de vitaminas B, C y D, y aporta minerales como magnesio, potasio, yodo y zinc. Además, hay que destacar su contenido en polifenoles, teofilina, cafeína y fibra.
Pero sin duda alguna, son sus propiedades las que más han llamado la atención. Propiedades que van desde las diuréticas y digestivas a las antioxidantes, antihistamínicas o estimulantes.
La dieta del té rojo
Tal y como comentábamos, el té rojo se ha convertido en un interesante aliado para perder peso. Aunque no es milagroso y no se adelgaza tan solo por tomarlo, en el marco de una dieta cuidada y equilibrada sí ayuda.
Esto se debe a su poder termogénico, que acelera el metabolismo de nuestro cuerpo favoreciendo la quema de grasa.
Además, mientras sus propiedades digestivas estimulan la vesícula favoreciendo la eliminación de grasas, su poder diurético ayuda a deshacernos de las toxinas. De esta manera, notaremos nuestro cuerpo más ligero y menos hinchado.
Es por ello que diferentes expertos recomiendan seguir la dieta del té rojo para adelgazar de manera sencilla y efectiva. Una dieta de cinco días de duración, en los que llevar una dieta baja en grasas y calorías y rica en verduras, frutas y proteínas, y en la que tomaremos, al menos, cuatro tazas de esta infusión.
Con estas pautas, aseguran que deshincharemos nuestro cuerpo y podremos adelgazar hasta tres kilos.
¿Cómo hacer la dieta del té rojo?
Esta dieta recomienda empezar el día desayunando una taza de esta infusión, una pieza de fruta y una tostada de pan integral con, por ejemplo, mermelada sin azúcar.
En la comida, podemos elegir entre una ensalada de pasta o de arroz, o un arroz con verduras. Además, tomaremos otra pieza de fruta y una taza de té rojo, bebida que también tomaremos en la merienda.
Para la cena, las opciones son: ensalada variada, ensalada de pasta con verduras, ensalada de lentejas con verduras o arroz con pescado a la plancha. Remataremos nuestro menú diario con otra fruta y la cuarta taza de té rojo del día.
Contraindicaciones del té rojo
Aunque son muchos los que aseguran que esta dieta funciona, también advierten que no es recomendable para todo el mundo. Personas con insomnio, con problemas de nerviosismo o cardiacos deberían evitar el consumo excesivo de té y café, o al menos, consultarlo antes con un especialista. Por igual, esta dieta no está aconsejada para niños ni para mujeres embarazadas.
Tal y como indican, las pautas de esta dieta están creadas para llevarlas a cabo tan solo durante cinco días, por lo que no es recomendable alargarlas durante más tiempo.