Los dientes se pueden ver resentidos durante cualquier época del año, pero cuando llega el frío pueden sufrir incluso más que en verano. Además, la Navidad, época de comilonas, cenas de empresa y reuniones con amigos, hacen que descuidemos nuestra salud, nuestra dieta e incluso el cuidado de nuestra salud dental.
Las reuniones y cenas navideñas son momentos para disfrutar en familia, pero también pueden convertirse en una pesadilla si descuidamos nuestros dientes. Puede que no le des importancia, pero a la larga puede darte muchos quebraderos de cabeza y problemas que pueden ir más allá de una caries o un dolor de muelas.
Desde el consumo de mariscos (tan propios de estas fechas) hasta el uso de los dientes como herramientas improvisadas, las fiestas traen consigo riesgos para nuestra salud dental. Por ello, debemos estar más alerta durante las fiestas y así evitar la visita de urgencia al dentista.
Además, siempre es recomendable realizar una visita al dentista una vez pasadas las navidades (siempre al menos visita al dentista para una revisión una vez al año) y más si hemos notado alguna anomalía, dolor o irritación en los dientes, la boca o las encías.
Dientes a salvo
Con el fin de evitar roturas y otros dramas que puedan arruinar estas fechas, la doctora Belkys Martínez, odontóloga especialista en prostodoncia y estética, cirugía bucal e implantología de Sanitas, comparte con nosotros cinco consejos clave:
1. Cuidado con los mariscos y sus cáscaras duras. Morder cáscaras de marisco, como langostinos o nécoras, es muy común en las comidas navideñas, pero esta práctica es peligrosa porque "las cáscaras duras pueden provocar fracturas en los dientes o dañar restauraciones existentes", aclara la doctora. "Usa herramientas adecuadas como cascanueces o tijeras de cocina para abrir los mariscos. Nunca uses los dientes", aconseja.
Los dientes pueden peligrar al comer marisco por posibles roturas. Foto: Pixabay.
2. Evita alimentos muy pegajosos o duros. Los dulces típicos de esta época, como son los turrones duros o los caramelos, desgastan los dientes, causan fracturas o incluso arrancan empastes o coronas. “Opta por turrones blandos o dulces menos agresivos para los dientes. Mastica lentamente y evita morder directamente alimentos duros", recomienda la doctora.
3. No uses los dientes como abridor. Puede parecer una locura, pero mucha gente lo hace y esto provoca muchísimos problemas dentales. Abrir botellas, romper cinta adhesiva o cortar hilos con los dientes es bastante habitual en estas fechas con la llegada de los regalos. Sin embargo, según la doctora Belkys Martínez, este hábito "puede generar grietas, fracturas o incluso aflojar dientes previamente restaurados. Ten siempre a mano tijeras, abridores de botellas o utensilios adecuados para estas tareas".
4. Cuidado al brindar. Con el entusiasmo de las celebraciones, las cenas y las fiestas con amigos o familiares, chocar las copas con demasiada fuerza puede provocar fracturas en dientes anteriores, especialmente si la copa es de vidrio grueso. “Brinda con suavidad y asegúrate de no morder o chocar con fuerza el borde de la copa", añade la experta.
5. Protege tu boca. Los juegos en familia, las actividades físicas en reuniones, ciertos bailes... pueden terminar en golpes accidentales sobre todo cuando hay niños o demasiada actividad. “Intenta mantener un ambiente seguro, especialmente en zonas donde se corra o juegue. Si vas a participar en actividades intensas, considera usar un protector bucal”, concluye la doctora Belkys Martínez.
¿Bebidas espumosas y problemas dentales?
La época navideña trae consigo celebraciones donde el champán, el cava y el vino son protagonistas. Estas bebidas, a pesar de ser populares, pueden comprometer el bienestar de dientes y encías debido a su frecuente consumo durante estas fechas. Por ello, entender sus efectos y adoptar medidas preventivas es clave para disfrutar de las fiestas sin dañar la sonrisa.
“Este tipo de bebidas generan un entorno ácido en la boca, lo que puede erosionar el esmalte dental. Además, los pigmentos en el vino tinto o el cava agravan las manchas superficiales, mientras que el azúcar contenido en estas bebidas alimenta a las bacterias responsables de la caries dental”, nos explica Sara Rueda, nutricionista de Blua de Sanitas.
Ojo con los brindis y tus dientes al acercar la copa. Foto: Pixabay.
Ante esta situación, es esencial controlar su ingesta para no originar daños duraderos que obliguen a recurrir a tratamientos como empastes dentales o reconstrucciones del esmalte. ¿Cómo podemos hacer para evitar problemas con ese tipo de bebidas?
-Enjuagarse con agua después de cada brindis. “Ayuda a neutralizar el pH ácido provocado por las bebidas alcohólicas, protegiendo el esmalte de la erosión. Cabe mencionar que este simple hábito también elimina restos de pigmentos que manchan los dientes y reduce la acumulación de bacterias en la boca”, explica Michelle Pawly, odontóloga del departamento de Innovación y Calidad Asistencial de Sanitas Dental.
-Usar una pajita para beber. Aunque te suene extraño, la experta recomienda este pequeño gesto para disminuir el contacto de los líquidos con los dientes y minimizar la probabilidad de manchas y la exposición prolongada a los ácidos. Por otra parte, es especialmente útil en personas con esmalte dental debilitado o tendencia a la sensibilidad.
-Escoger enjuagues bucales con flúor. Los colutorios con este mineral contribuyen a remineralizar el esmalte dental, fortaleciéndolo frente a los ataques ácidos de bebidas como el champán o el vino. Este refuerzo es clave para prevenir caries y mantener los dientes protegidos durante periodos de consumo frecuente.
-Evitar combinar bebidas con alimentos cítricos. Frutas como el limón o la naranja aumentan la acidez en la boca cuando se combinan con bebidas alcohólicas, lo cual incrementa el riesgo de erosión dental. Por ello, limitar esta combinación es una forma eficaz de proteger el esmalte durante las comidas navideñas.
-Consumir alimentos que estimulen la saliva y fortalezcan el esmalte. Incluir alimentos crujientes como manzanas o zanahorias contribuye a una limpieza natural de los dientes, eliminando restos de comida y bacterias. Asimismo, la nutricionista añade que “tomar queso, que es rico en calcio y fosfatos, refuerza el esmalte dental, mientras que los frutos secos aportan nutrientes beneficiosos como vitamina E, magnesio y ácidos grasos esenciales para la salud de la boca”.
-Enfriar las bebidas antes de consumirlas. Beber a temperaturas más bajas es menos dañino porque mitiga el riesgo de irritación en los dientes y encías.
