Benito y su mujer decidieron emprender con 100 Montaditos en 2004, cansados de sus vidas. Invirtieron sus ahorros en una franquicia de la compañía Restalia después de buscar y valorar opciones durante un año. Sin embargo, junto con la compañía buscaron un formato diferente e innovador que les permitiera invertir aun sin tener el capital y así es como surgió un nuevo formato: el primer Kiosko 100 Montaditos, el cual abrió en la Plaza de la Estación de Fuenlabrada y que a día de hoy sigue operativo. 18 años después han crecido y pueden presumir de gestionar cuatro locales (tres 100 Montaditos en Fuenlabrada, Madrid y Toledo, y un TGB en Toledo) que funcionan a pleno rendimiento.
Pregunta: ¿Qué es lo mejor y lo peor de ser una franquicia?
Respuesta: Más que lo mejor y lo peor, lo que podría destacar es que se trata de un proceso de aprendizaje y crecimiento constante. Sin duda hay momentos más fáciles y otros más complicados. Pero cuando cuentas con el respaldo de un grupo como Restalia, es como tener una garantía de éxito: te van a acompañar en todo momento, tanto en los mejores como en los peores.
Si algo he aprendido muy bien durante estos casi 20 años trabajando en el sector de la restauración es que los tiempos cambian y hay que adaptarse para mantenerse. En un negocio hay épocas más fáciles y otras más complicadas. Si me preguntas si volvería a hacer lo mismo que hice hace 18 años, te diría que sí: volvería a abrir el primer Kiosko de 100 Montaditos en 2004. Tengo la satisfacción de saber que, mi mujer María y yo, hemos hecho bien las cosas, queríamos cambiar de vida con algo que nos motivase y hoy podemos decir que lo tenemos, lo hemos construido juntos empezando de cero, sin tener ninguna experiencia. Lo vivido para nosotros en estas casi dos décadas ha sido algo positivo.
P: ¿Por qué eligió una franquicia de Restalia?
R: Tanto mi mujer como yo veníamos de sectores muy diferentes a la restauración. Estábamos cansados de la vida que teníamos, sentíamos que necesitábamos hacer otra cosa. Empezamos a buscar entre las diferentes alternativas para emprender, buscando y estudiando opciones durante más de un año, hasta que conocimos la marca 100 Montaditos, nos llamó la atención, nos informamos y nos decidimos a ir a conocer el local de Xanadú. El concepto y la sencillez de su operativa nos conquistaron y decidimos ponernos manos a la obra, allá por 2004.
Decidimos emprender y abrir un 100 Montaditos en el momento en el que Restalia empezaba a crecer. Por ello, siempre hemos sentido que hemos ido creciendo juntos. Ellos estaban empezando a construir su infraestructura (tenían más de una treintena de locales en ese momento) y nosotros no teníamos mucha idea sobre cómo conseguir el éxito en la restauración. Además, nosotros no teníamos un capital muy grande para empezar pero si muchas ganas de emprender y de explorar diferentes ideas. Junto con el equipo de Restalia empezamos a buscar una solución… un formato que nos permitiera invertir aun sin tener el capital para abrir un local de 100 Montaditos como tal y así es como surgió un nuevo formato: el primer Kiosko 100 Montaditos, el cual abrimos en la Plaza de la Estación de Fuenlabrada y que hoy en día, 18 años más tarde, sigue operativo.
Después del éxito de nuestro Kiosko, con lo que habíamos ganado decidimos abrir un local en menos de dos años. Actualmente tenemos tres 100 Montaditos en Madrid, Fuenlabrada y Toledo, así como un TGB -The Good Burger-, en Toledo.
P: ¿Cómo valora la decisión tomada hasta la fecha?
R: Totalmente acertada. Como comentaba, actualmente tenemos 4 locales. Restalia y sus marcas siempre han sido un reclamo para los clientes, que encuentran en 100 Montaditos, por ejemplo, un refugio donde disfrutar del ocio que ofrece la restauración, a precios razonables, especialmente en momentos de crisis.
Desde nuestra perspectiva, podemos decir que hemos ido aprendiendo con Restalia, ya que desde el principio han estado a nuestro lado, asesorándonos y enseñándonos. Sin embargo, la fórmula del éxito se debe a la suma de ideas innovadoras, con fuerza para atraer clientela de manera continuada, y al trabajo duro de todas las partes. Ha habido cosas que han salido bien, otras que no… ¡Cada local es un mundo! Pero desde luego, la innovación y las promociones como la “Euromanía” nos ayudan mucho a dinamizar el consumo y a atraer más clientes.
Además, cuando abres un local tienes que observar y analizar cómo es el entorno, los clientes, cuáles son tus opciones de venta y qué es lo que debes hacer. Es imprescindible estar en el día a día del negocio para verlo, porque es tu local y tú eres el principal interesado de que sea un éxito. En definitiva, implicarte al 100% para asegurarte de que todo funciona como debe.
P: ¿Qué es lo que más valora de su franquiciador?
R: Lo que más valoro de Restalia es su cercanía, la ayuda, y el trato con ellos, ya que siempre me han escuchado, asesorado y ayudado cuando lo he necesitado. Después de tantos años juntos, son como una familia.
Además, su espíritu innovador y su búsqueda incesante de nuevos conceptos para atraer al cliente siempre han remado a nuestro favor. Por ejemplo: a raíz de la crisis del 2008, hicimos muchas cosas nuevas que con el paso del tiempo lo único que han hecho ha sido mejorar: desayunos, la Euromanía, la incorporación de las patatas fritas en nuestra carta… Todo eso nos llevó a construir la marca que es hoy 100 Montaditos.
Restalia es una palanca que impulsa el negocio: te dan ideas, se mueven, buscan, exploran, lanzan y te brindan una labor de asesoramiento y recomendación constante de la que siempre se aprende
P: ¿Cuál es la clave para que un negocio de franquicia sea rentable?
R: Como decía antes, es una suma de varios factores en los que la innovación, el saber hacer las cosas y el trabajo duro son el 95%. En innovación y en saber hacer las cosas, Restalia sin duda es una palanca que impulsa el negocio: te dan ideas, se mueven, buscan, exploran y lanzan. Luego, hay una labor de asesoramiento y recomendación constante de la que siempre se aprende. Me estoy acordando la primera vez que tuve que hacer una cuenta de explotación, durante dos meses se venían dos asesores conmigo para enseñarme a hacerla porque no sabía. Yo tengo que reconocer que a mí me han ayudado siempre, siempre que he necesitado algo han estado conmigo, directores, managers, asesores…
Y, por supuesto, hay que trabajar mucho. Quien piense que no hay que trabajar se equivoca, al fin y al cabo, esto es un negocio y hay que estar pendiente de todos sus aspectos dedicándole plena atención.
Evidentemente, no es un camino fácil. Siempre hay diferencias y otros puntos de vista. En el camino hay que equivocarse para aprender y tomar mejores decisiones. ¡Ojalá tuviera una bola de cristal! Antes empezábamos a vender por la tarde y ahora tenemos un modelo de negocio que empiezas a vender desde que abres por la mañana hasta que cierras el local por la noche, con los desayunos o la Euromanía.
P: ¿Cree que el modelo de negocio de Restalia es el adecuado para proteger los intereses tanto del franquiciado como del consumidor?
R: Sin dudarlo. En mi caso, he tenido la oportunidad no solo de abrir mi propio 100 Montaditos, sino de hacer crecer mi negocio junto a ellos. Restalia es la matriz y nosotros somos quienes ponemos en marcha su operativa y las ideas que van apareciendo, dinamizando la oferta y permitiéndonos tener rentabilidad en nuestros locales.
Mi relación con Restalia siempre ha sido excelente. Siempre han sido transparentes y han actuado respetando los acuerdos que con ellos hemos firmado para beneficio mutuo, nosotros como franquiciados y ellos como empresa matriz
P: Bajo su punto de vista, ¿cuáles son los puntos fuertes de su negocio?
R: Creo que 100 Montaditos es algo especial y no creo que otra marca lo pueda conseguir, somos parte de la historia de muchas personas, somos una marca social. Puedo decir que la marca es lo suficientemente elástica y atractiva como para atraer a un público muy heterogéneo. Por 100 Montaditos pasan generaciones muy diferentes: a lo largo de los años he conocido a familias que venían con sus hijos pequeños y ahora son sus hijos mayores los que vienen, y también abuelos que viene con sus nietos y que lleva viniendo 18 años.
Esto demuestra que lo que ofrece Restalia es un refugio para los clientes, que saben que siempre pueden venir a nuestros locales, incluso en los momentos más difíciles, para disfrutar de un rato de ocio, ajenos a las preocupaciones. Por ejemplo, cuando lanzamos la Euromanía en 2008, todo el mucho nos tachaba de locos. Sin embargo, se trataba de un momento de crisis donde una idea nos ayudó a impulsar el negocio, consiguiendo incrementos en el consumo, viendo costes de productos que se reducían y ampliaban los márgenes, esto nos convirtió en el refugió social que seguimos siendo hoy y que estoy súper convencido de que lo seguiremos siendo. No podemos olvidarnos de quién somos y qué le ofrecemos a la sociedad, tenemos que mantener nuestra esencia.
Estamos a las puertas de otra gran crisis, vamos a sufrir porque venimos de un gran desgaste de dos años de pandemia que nos han machacado, pero hemos salido adelante y estoy convencido de que saldremos de lo que venga, todos juntos lo conseguiremos, porque tenemos las marcas idóneas para ello y un equipo profesional totalmente implicado.
P: ¿Cómo definiría su relación con Restalia?
R: Excelente y continuada. Su cercanía en el trato, su ayuda, su atención, siempre han contribuido a hacer crecer mi proyecto. Yo no pienso que seamos diferentes, creo que somos como una familia.
P: ¿Cómo valora su propia experiencia cómo franquiciado?
R: Muy positiva. Lo más importante para mí ha sido aprender, no solo durante los primeros años, si no día a día. Incluso hoy, después de tanto tiempo y después de tantas cosas, sigo aprendiendo.
Al final el objetivo que perseguimos es compartido con Restalia. Nosotros no pretendemos que ellos hagan todo, nosotros trabajamos y remamos en la misma dirección, nos volcamos al 100% en el negocio y eso se nota. Yo he conocido a muchos perfiles durante estos años y te das cuenta quién quiere emprender realmente; para ello tienes que analizar la evolución del negocio y todos los factores que éste engloba porque son fundamentales, nuestro trabajo como franquiciado es muy importante, hay que estar muy encima de tus locales y de tu equipo.
P: Como franquiciado, ¿se siente cuidado y valorado por Restalia?
R: Sin duda. Como decía, su atención, su cercanía y su labor de asesoramiento para mí son imprescindibles.
P: ¿Le ha sorprendido el ruido que se ha levantado con las informaciones aparecidas en prensa?
R: Yo puedo hablar por mí y mi relación con Restalia siempre ha sido excelente y, prueba de ello, es que he pasado de uno a cuatro locales, todos ellos funcionando viento en popa. Siempre han sido transparentes y han actuado respetando los acuerdos que con ellos hemos firmado para beneficio mutuo, nosotros como franquiciados y ellos como empresa matriz.