Mientras Cándido Conde-Pumpido, hijo del presidente del Tribunal Constitucional, continúa ingresado en un centro psiquiátrico desde el pasado viernes tras un supuesto intento autolítico, se han conocido ahora todos los detalles de cómo fue la detención por la presunta agresión sexual a una mujer brasileña. El informe policial ha salido a la luz así como el volante médico de ingreso hospitalario desvelando todos los detalles de lo que ocurrió, desde la asistencia de un cerrajero a encontrar una bolsa con cocaína en los zapatos del abogado y expareja de Lara Dibildos.
En la misma semana, Conde-Pumpido fue ingresado en dos ocasiones. La primera vez, el miércoles 8 de noviembre, ingresó en la planta de psiquiatría de un hospital de Madrid. Tras recibir el alta, las cámaras le grabaron en su casa haciéndose pasar por un repartidor de comida rápida. A los dos días volvió a ingresar en un centro especializado en problemas psiquiátricos.
El pasado viernes se pudo ver llegar a la casa de Conde-Pumpido, situada en San Blas-Canillejas, a una ambulancia del Summa, escoltada por el Cuerpo Nacional de Policía. Fuentes médicas confirmaron que se trató de una orden judicial a petición de un familiar directo, que podría haber sido la madre de Conde-Pumpido, que está muy preocupada por la salud de su hijo.
El hijo de Cándido Conde-Pumpido padecía algunos problemas de salud, una "patología psiquiátrica", según señaló su entorno, que se habría agravado tras el estrés y la angustia producidos por la polémica en la que se ha visto envuelto tras ser acusado de agresión sexual. La denuncia de la mujer le llevó a ser detenido el pasado 3 de noviembre y puesto en libertad sin medidas cautelares el domingo tras pasar el fin de semana en el calabozo.
Así fue la detención de Cándido Conde-Pumpido según el informe policial
El programa 'Y ahora Sonsoles' ha tenido acceso al informe policial y ha desvelado todos los detalles de la detención. La policía acudió el pasado viernes 3 de noviembre al domicilio de Cándido Conde-Pumpido para detenerle por una presunta agresión sexual en grupo sobre las 19:20 horas. "No contesta al telefonillo, se procede a llamarle varias veces por teléfono sin recibir contestación alguna", según aparece en el informe de la policía.
A las 20:30 horas apareció en la puerta de la vivienda, un amigo de Cándido, otro de los denunciados por el mismo supuesto delito, que fue detenido minutos después. Entonces, para sorpresa de la policía, llegó también una mujer buscando a Conde-Pumpido, era su madre, que llevaba horas sin saber nada de su hijo. "Está preocupada por el estado de salud de su hijo ya que toma medicación. Teme por su vida y que le haya ocurrido algo grave o pueda tener intención de algún intento autolítico", reza el informe de la policía.
La madre de Cándido Conde-Pumpido trató de acceder a la vivienda con un juego de llaves pero la puerta estaba bloqueada por dentro. Apareció también un abogado, un compañero de Conde-Pumpido que trata de acceder sin éxito. Entonces, deciden llamar a un cerrajero para que fuerce la entrada.
"Cuando comenzó a forzar el bombín de la cerradura, se escucha una voz fuerte y grave desde el interior: ¿Quién anda ahí? ¿Quién está golpeando la puerta", se lee en el informe policial. Entonces Cándido, abrió la puerta y jugó al despiste. "Manifestó que estaba dormido que no le ocurría nada", según el informe.
La madre de Cándido se anticipó a su reacción, llamó a una ambulancia y consiguió un volante de ingreso hospitalario. "Solicita que se proceda a su valoración médico-psiquiátrica urgente siendo efectuada de manera forzosa en caso de no aceptar voluntariamente", señala el informe policial.
Cuando llegaron al hospital, se procedió a la detención y le cachearon. "Encuentran a la altura del tobillo, entre el calcetín y su zapatilla, un mechero. En el interior del calzado, había una bolsa de plástico, al parecer con cocaína", se lee en el mencionado informe que ha emitido el programa 'YAS'.
Cuando esto sucedió ya eran casi las 4 de la mañana. Cándido Conde-Pumpido se quedó custodiado en el hospital toda la noche hasta que al día siguiente acudió a declarar con su abogado al juzgado.