El Banco de España ha publicado este jueves un nuevo informe sobre el coste de las intervenciones en el sector financiero desde el año 2008. Y llega a una conclusión clara: el rescate ha provocado un impacto fiscal del 4,2% del PIB en España, más del doble que en el conjunto de la zona euro.
Aún así, avisa de que el el coste final de la asistencia al sector financiero no quedará completamente identificado hasta que concluyan los procesos de reestructuración pendientes y finalice la exposición que todavía tiene el sector público frente al sector bancario.
Los pasíses que han experimentado un mayor incremento de su endeudamiento son Chipre (20,8%), Grecia (19,8% del PIB) e Irlanda (19,6%), con cifras muy por encima del coste fiscal medio de la zona euro, que fue del 1,9%.
Y en algunos países como Dinamarca o Luxemburgo las ayudas a la bancaya han generado cierto retorno, lo que ha permitido cierta reducción de sus niveles de endeudamiento.
Aumento de la deuda
Si se tienen en cuenta el aumento bruto de los pasivos, las intervenciones en el sector financiero han provocado un aumento de la deuda pública de alrededor del 4,8% tanto en España como en la zona euro.
Durante el periodo 2008-2015, España utilizó 61.900 millones de euros para sanear su sistema financiero, de la inyección de 174.300 millones de euros aprobada, la mayor cifra de toda la zona euro.
Alemania y Reino Unido dieron luz verde a inyecciones de capital por 114.600 millones para su sector financiero, de los que usaron 64.200 millones y 100.100 millones, respectivamente. Bulgaria y Croacia fueron los dos únicos países de la eurozona que no inyectaron capital en su sistema financiero.