La agencia de calificación Moody's ha puesto en revisión el 'rating' a largo plazo de Telefónica, situado en 'Baa1' (calidad aceptable media), así como su nota a corto plazo 'Prime-2' (calidad buena con alguna sensibilidad al entorno), debido a la dificultades de la compañía en el mercado español.
Moody's ha explicado que esta puesta en revisión para una posible rebaja en las calificaciones de Telefónica pone de manifiesto las preocupaciones crecientes acerca de los ingresos de la compañía, el margen de flujo de caja operativo y la velocidad en el proceso de desapalancamiento del grupo en un entorno cada vez más difícil en España, así como una posible desaceleración mayor en algunas de las operaciones internacionales de la multinacional.
"El entorno macroeconómico doméstico, la regulación y el impacto debido a la contracción del gasto de los consumidores es probable que se traduzca en una mayor presión sobre los ingresos de Telefónica y su flujo de efectivo", ha explicado el vicepresidente senior de Moody's y analista de Telefónica, Carlos Winzer.
Winzer ha matizado que, si bien Telefónica ha tomado medidas "decisivas" para mitigar los efectos del difícil entorno operativo en España, como un recorte de la retribución a los accionistas en 2012, la venta de algunos activos no estratégicos, la mejora de iniciativas en el área comercial y la reducción de los gastos operativos, el flujo de caja operativo del grupo seguirá enfrentándose a una "presión continua".
"Esto podría cuestionar la capacidad del grupo para mejorar sus indicadores crediticios a fin de alcanzar un nivel acorde con las calificaciones actuales", ha añadido el analista.
La agencia de calificación prevé que los débiles resultados en el primer trimestre continúen en el segundo trimestre de 2012, aunque con la posibilidad de una "leve mejoría" durante el segundo semestre del año.
Además del mercado domestico, la agencia de calificación ha señalado que durante la revisión analizará la debilidad de las operaciones del grupo en Reino Unido y las perspectivas de crecimiento "incierto" Brasil, así como los retos estratégicos a los que se enfrenta Telefónica por el aumento de la intensidad competitiva esperada en Alemania.
Este anuncio de Moody's se produce un día después de que Standard & Poor's rebajará la nota de solvencia a largo plazo de Telefónica hasta 'BBB', desde 'BBB+', con perspectiva 'negativa' por las intensas presiones a las que se enfrenta la operadora española en el mercado doméstico.