Inditex vuelve a recuperar su trono bursátil. El gigante textil ha superado en capitalización bursátil a su principal rival en las tablas, Iberdrola. La energética superó a la compañía con sede en Arteixo este verano, en medio de la vorágine por la guerra en Ucrania, que irrumpió como un elefante en una cacharería en las cuentas de Inditex.
Rusia era uno de los mercado más relevante para Inditex, ya que allí empleaba a 9.000 personas y representaba antes del estallido de la guerra el 8,5% del Ebit del grupo.
Ante la incertidumbre de qué pasaría en el país invasor, los mercados se replegaron y decicdieron recoger beneficios en Inditex, lo que produjo un desplome de su valor en Bolsa. Pasado el nerviosismo, la compañía comenzó a recuperarse. La última noticia conocida, Inditex abandona Rusia y vende todas sus tiendas a un consorcio de Emiratos Árabes, ha termino por devolver a la multinacional al primer puesto.
A cierre del mercado, las acciones del gigante textil cerraron en 23,47 euros, lo que se traduce en una capitalización bursátil de 73.000 millones de euros. Iberdrola, en cambio, su valor aumenta hasta los 64.000 millones de euros, a 10,24 euros la acción.
Problemas para Iberdrola
A la subida de Inditex se suma la caída de la compañía presidida por Sánchez Galán. A pesar de haber presentado unos resultados de 3.104 millones de euros en los primeros nueve meses del año, lo que representa un incremento del 29% con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, la sombra del impuestazo a las energéticas planteado por el Gobierno, sigue haciendo daño al valor en Bolsa.
De hecho, Iberdrola, Endesa, Acciona, Naturgy, Repsol o Acciona han dejado constancia de la incertidumbre regulatoria a la que se enfrenta su sector en España. El riesgo más importante es el impuesto. Una iniciativa que había anunciado Pedro Sánchez tras el consejo de ministros del 25 de junio para exigir al sector que colabore tras sus "beneficios extraordinarios".
Sánchez Galan, en la presentación de resultado, amenazó con "acurdir a los tribunales". El presidente de Iberdrola defendió que "esta medida va contra las directivas europeas que dicen que esto es un impuesto sobre los beneficios extra, no habla sobre ingresos, y nuestros abogados van a trabajar como siempre de una manera muy eficiente. Nosotros pagamos 3.800 millones en impuestos en España y es un dinero que ayuda también a los vulnerables. No veo ninguna razón para pagar más impuestos”.