El largo abrazo que el empresariado madrileño brindó al catalán Joan Rosell en el camino de éste a la presidencia de la patronal amenaza, un año después, con asentar una peligrosa cacofonía en el armazón de la Ceoe. El jueves pasado el líder de la patronal madrileña (Ceim) y vicepresidente de la Ceoe, Arturo Fernández, alabó la propuesta de Esperanza Aguirre de terminar con las subvenciones a sindicatos, partidos políticos y patronal. Las palabras de la presidenta regional “van por el buen camino”, dijo. Sus palabras, en cambio, han sido relativizadas tanto desde Ceoe como desde Ceim. Y no es la primera vez que ocurre.

"Lo que tenemos que hacer patronales, sindicatos y partidos políticos es no pensar en las subvenciones. Tenemos que vivir con nuestros propios medios", prosiguió Fernández. Pero la realidad es tozuda. Si bien CC OO y UGT están recortando mucho en personal por la caída de estas partidas, la Ceoe también se ajusta el cinturón con despidos, prejubilaciones o vencimientos de contrato. Y, aunque es difícil conocer al detalle cuánto recibe quién –hay subvenciones estatales, autonómicas…-, la cuantía dirigida a la patronal oscila entre 500 y 1.000 millones de euros. Por otro lado, las subvenciones estatales que recibe el sector privado se estiman en 30.000 millones.

La mayor parte de este dinero se destina a cursos para el empleo, gestionados por la Fundación Tripartita. “No, no somos favorables a las subvenciones, sino a las contraprestaciones. No es lo mismo una subvención que un dinero cuyo gasto tienes que justificar”, defienden en Ceoe. Gran parte de las prestaciones dirigidas a CC OO y UGT, cuyo número de afiliados ronda el millón para cada central, también va a parar a los cursos de formación.

En Ceoe apostillan que las declaraciones de Arturo Fernández son a título individual. Pero a nadie se le escapa que no son las primeras que, en cierta manera, regatean el discurso oficial, el del presidente Juan Rosell, precisamente ahora inmerso en la negociación colectiva, relanzada a finales de octubre.

El pasado mes de junio, la patronal madrileña reventó la negociación cuando el acuerdo entre los sindicatos y Rosell estaba a punto de fraguarse. Y, por si las desavenencias anteriores fueran pocas, Ceim ha decidido suspender sus pagos a la Ceoe por una antigua polémica vinculada a la gestión de Rosell al frente de Fomento del Trabajo, la patronal catalana.

Desde Ceim también minimizan el apoyo de Fernández al fin de las subvenciones. “Sí, que no haya más ayudas estatales es parte de nuestra filosofía general dentro del ajuste público que defendemos. Pero Arturo no precisó si con subvenciones se refería a todas las partidas, o solo a aquellas sin justificar. Somos conscientes de que hay una legislación que cumplir mientras ésta no cambie”.