Los bancos centrales del Eurosistema, el Banco Central Europeo (BCE) y las entidades monetarias nacionales están canjeando la deuda soberana griega en sus carteras por nuevos bonos a su valor nominal, según informa el diario Die Welt y la agencia Reuters.
Los bancos de la zona euro poseen en torno a 20.000 millones de euros en deuda griego en sus carteras de inversión tradicionales. Pero esos bonos estarán sujetos a los mismos descuentos que los que van a asumir los inversores privados. Además, el BCE posee más de 50.000 millones de bonos griegos como parte del plan iniciado en mayo de 2010 para rescatar a Grecia. Cambiando esos bonos, el BCE tendrá que asumir pérdidas que, hasta ahora, no quería consentir.
Según las fuentes de Die Welt, este canje debería estar completado el próximo lunes 20 de febrero. En ese momento, el BCE renunciará al 50 % de sus derechos, unos 100.000 millones de euros. Si los bancos centrales y el BCE asumen esas pérdidas en sus carteras de inversión en bonos, proporcionaría una cantidad inmediata a Atenas y representaría una nueva contribución del BCE, además de los beneficios de 12.000-15.000 millones de euros derivados del programa de compras y que también estarán disponibles.
Pero tampoco el debate está cerrado, y el BCE sigue estudiando otras posibilidades para rescatar a Grecia. La entidad europea baraja varias opciones. Una de ellas es un canje de los bonos que atesora del país heleno, un plan al que ya se ha puesto el Bundesbank. La otra posibilidad que está en la mesa, a la que se había opuesto hasta ahora, es asumir pérdidas en la quita de deuda que negocian los inversores privados. Esta decisión está relacionada con el acuerdo sobre la deuda helena con el sector privado, que se espera quede cerrado la semana próxima o este viernes.