Los empresarios catalanes han pasado de la preocupación a la acción. Y el más destacado en dar ese paso ha sido el Presidente de La Caixa, Isidre Fainé, que está pidiendo a los gobiernos de Madrid y Barcelona que “rebajen” el tono de su enfrentamiento. Según han confirmado tanto fuentes del PP como de la Generalitat, Fainé está manteniendo varias conversaciones semanales con Artur Mas y con Mariano Rajoy para que “reconduzcan” su confrontación.
En la última semana, Fainé ha hablado con el Presidente y con el President pero no ha sido el único en hacerlo: otros empresarios están trasladándoles el impacto que sus declaraciones tienen en el clima de múltiples negocios con sede en Cataluña y mercado en España. Pero esas conversaciones están convirtiendo, además, a los líderes empresariales en correo entre los líderes políticos.
Fainé ha exigido a ambos responsables políticos que respeten la “neutralidad” de las entidades y, según fuentes de ambos gabinetes, ambos confían en que la tensión se rebaje después de la cita electoral, el próximo 25 de noviembre. Fuentes de la Generalitat aseguran que se le ha transmitido un mensaje de "escrupuloso respeto a la independencia de su negocio".
Presiones tanto catalanistas como españolistas
La mediación de Fainé llega después de la presión que están ejerciendo sobre su entidad tanto el catalanismo como el españolismo. En las últimas semanas, sectores de las juventudes catalanistas y el presidente de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Oriol Junqueras, han exigido a la entidad que “impulse la independencia”. Por su parte, los sectores más cerrados a la derecha han pedido a la entidad que haga una declaración de “adhesión y defensa de la unidad de España”.
Fainé exige a los dos presidentes que respeten la "neutralidad" de La Caixa
La entidad pretende, como el resto de empresas atrapadas entre el fuego cruzado, salvar su actitud de “neutralidad”. De hecho, fuentes de la entidad bancaria recuerdan que las tensiones con el gobierno vasco nunca forzaron al BBVA a ningún tipo de posicionamiento ni declaración política.
Fuentes socialistas reconocen que también Alfredo Pérez Rubalcaba ha llamado y sido llamado por el Presidente de La Caixa para reconducir la situación. “Existe una comunicación fluida entre ambos”, reconocen fuentes del PSOE conscientes de la preocupación que ha calado entre el empresariado catalán tras el tono de los últimos días.
Los pequeños empresarios plantean peticiones concretas
Frente a los grandes nombres del mundo de la empresa, también las pymes se han puesto en contacto con el gobierno catalán para plantearle reivindicaciones concretas de cara a una futura negociación, aseguran fuentes de la Generalitat. En concreto, esas empresas plantean dos reivindicaciones históricas:
- Una conexión ferroviaria con el norte de Europa: Para ello, sería necesario un ancho de vía que permita la conexión por ferrocarril con Francia para evitar el desvío que las mecancías hacen a día de hoy y que obliga, según afirman, a hacer una ruta Suez-Gibraltar-Rotterdam. Esa infraestuctura ampliaría la capacidad comercial catalana.
- El corredor mediterráneo: Una obra que se sigue retrasando por la falta de inversión pública y que los empresarios han descrito al Govern como "prioritaria"
Tanto las grandes empresas como las pymes ponen ahora su mirada en una fecha: el día 26 de noviembre, el día después de las elecciones autonómicas.
