En pocos días, Anagrama publicará el nuevo libro de Paul Auster. Y lo hará priemro en formato e-book que en papel. Matador, la revista de la editorial La Fábrica, publicación especializada y dirigida a un público elitista amante del arte y los ensayos sobre estética dispondrá ahora de una versión iPad de la revista. Es, sin duda, un proceso en marcha.
El formato digital digital va ganando terreno en España. En lo que a libros se refiere, las cifras aportadas por la Agencia del ISBN en 2011 registraron un total de 17.843 obras en este formato, lo que supone un incremento del 38 por ciento con respecto a las cifras del año anterior.
Según informó la Federación de Gremios de Editores de España (FGEE), en 2010 se editaron en España casi 13.000 libros en formato digital, según la Panorámica de la Edición Española de Libros elaborada por el Ministerio de Cultura de ese año.
Los cerca de 18.000 libros digitales registrados en 2011 representan el 17 por ciento del total de obras inscritas en la Agencia del ISBN en España y reflejan el creciente interés del sector editorial por ofrecer a sus lectores títulos editados en formato digital.
Frente a este avance de lo digital, el libro de papel ha experimentado en cambio una caída del 12 por ciento, ya que en 2011 la Agencia del ISBN registró 84.510 obras (entre primeras ediciones y reediciones). Además, se inscribieron en esa agencia 9.246 obras más en otros formatos diferentes (cd, dvd...).
La Federación de Editores tiene claro que en los últimos años se está produciendo en el sector editorial español "un cambio de tendencia respecto a la apuesta por el mercado de obras digitales".
En 2010, la mitad de las editoriales comercializaban un cinco por ciento de su catálogo en versión digital, pero en 2012 una de cada cuatro editoriales comercializará más de la mitad de su catálogo en versión digital, según la segunda Encuesta sobre el Libro Digital en España, realizada por la Federación de Gremios de Editores de España, en colaboración con la Fundación Germán Sánchez Ruipérez.
Según este estudio, publicado a comienzos de 2011, el 75 por ciento de las editoriales disponía de un proyecto digital y comenzó a realizar, o tenía previsto hacerlo en los próximos años, acciones de digitalización, comercialización de obras digitales o de creación de obra exclusivamente digital.
En cuanto al precio de los libros digitales, la tendencia que se observa es que será inferior a la edición impresa en un 30 por ciento, a lo que se suma, además una mayor amplitud y variedad en el rango de precios dentro de ese mismo espectro, lo cual ofrece mayores opciones a los consumidores con respecto al precio dijo del libro.