El libro de peleas de PSOE y Podemos tiene un capítulo a cuenta de las productoras. El futuro de la ley audiovisual depende de que ambos partidos logren un acuerdo de última hora sobre el estatus de los productores independientes. A escasas horas de que se vote este jueves la norma, el Ejecutivo no tiene amarrados los apoyos necesarios para sacarla adelante.
Los morados, en coordinación con ERC y Bildu, presentaron este miércoles una enmienda transaccional a otra presentada por los socialistas para eliminar la ambigüedad en la definición de los creadores porque, denuncian, permitirá el fraude y la creación de falsas compañías independientes hechas a la medida de las televisiones y las plataformas, obligadas a invertir entre un 5 y un 6% de su facturación bruta en cine y series como favor hacia la responsabilidad social. Y eso afectaría a los intereses de productores como Jaume Roures.
Fuentes gubernamentales socialistas explicaron este miércoles que tras su enmienda de última hora hay un conflicto de intereses. Esa enmienda, sobre el estatus de los creadores independientes, mosqueó a los socios habituales del Ejecutivo, como el PNV y la propia ERC, con quienes había un acuerdo. Pero el PSOE se vio obligado a abrir de nuevo las negociaciones para salvar la ley.
Cambio y contracambio
El cambio que introdujeron primero los socialistas en el texto tan solo cambiaba una palabra por otra, según la redacción propuesta a la que ha accedido este diario. El problema es que esa expresión otorgaba la categoría de productora independiente a las grandes empresas audiovisuales, siempre y cuando estas no prestasen servicio a su propia cadena. Y eso abrió la caja de pandora, porque las asociaciones de productores protestaron con fuerza este miércoles en el Ateneo de Madrid y exigieron al Gobierno que diera marcha atrás para "salvar al cine" de una "herida de muerte".
Ahora, solo el PSOE tiene en su mano evitar que la ley audiovisual en su conjunto no vea la luz. Corresponde a los socialistas decidir si apoya o no la enmienda transaccional a la que fuentes de Unidas Podemos confirman que votarán 'sí'. El resto de actores implicados, como ERC, se lo piensan. Fuentes de ERC consultadas por este diario señalan que aún no han decidido su voto. Pero ya avisan de que lo acordado con el Gobierno respecto al fomento del catalán "no se toca".
De esta manera, en caso de que ERC optara por abstenerse por no alcanzarse un acuerdo, la ley podría caer por el 'no' de PP, Vox, Junts y el PDeCAT. Bildu y Cs están a la espera del desarrollo de unas negociaciones que, al cierre de esta información no había arrojado avance alguno, según fuentes parlamentarias socialistas.
Fumata blanca con las injurias a la Corona
Mientras los grupos engrasan su maquinaria para cerrar un pacto que salve la ley audiovisual, el PSOE permitió este miércoles por la tarde en el Senado la toma en consideración de una proposición de ley para despenalizar las injurias a la Corona y los ultrajes a España a propuesta, precisamente, de ERC y Bildu. Y eso que, en un principio, los socialistas fueron críticos con los planes de sus socios independentistas.
Pero lo cierto es que con 145 votos a favor, 111 en contra y dos abstenciones, la proposicón supera el trámite para llegar al Congreso de los Diputados en forma de debate. La iniciativa propone suprimir del Código Penal los artículos referidos a los delitos contra la Corona, entre ellos el 491, que impone penas de cárcel de seis meses a dos años para quienes usen la imagen del rey o reina o de cualquiera de sus ascendientes o descendientes y dañen el prestigio de la Corona.
