El mes de noviembre sigue transitando en Canarias en el periodo de alta presencia de cayucos y pateras desde África occidental. Mientras la ruta migratoria mucho menos transitada este año, la ruta del Mediterráneo central, con un 64% menos de llegadas entre enero y septiembre, o 47.700 efectivos, el número de detecciones en la ruta de África occidental se mantiene excepcionalmente elevado durante el período enero-septiembre, alcanzando más de 30.600 personas, el doble de la cifra registrada en el mismo período del año pasado, señaló esta semana Frontex. Las detenciones que se originan en origen cuentan con el respaldo de España que tiene destacamentos en Senegal, otro en Mauritania y tres Asistencias Técnicas de vigilancia fluvial en Saint Louis y Kaolack (Senegal) y Banjul (Gambia).
Este camino que conduce a Canarias ha sido recorrido en los últimos meses por miles de candidatos al exilio, procedentes especialmente de Senegal y Mauritania. Según las últimas cifras del Ministerio del Interior, entre el 1 de enero y el 15 de octubre de 2024 desembarcaron en el archipiélago 32.800 personas, un 39,7% más que en el mismo periodo de 2023, indica la misma fuente. Las detenciones de patrones de cayucos salidos o detenidos en su tránsito por aguas saharianas no deja de crecer.
La ONG Horizonte Sin Fronteras (HSF) ha denunciado el estado de más de 300 patrones de embarcaciones de senegaleses se encuentran actualmente detenidos en Marruecos, principalmente por delitos relacionados con la emigración irregular rumbo a Canarias. Según el presidente de HSF, Boubacar Sèye, algunos de ellos cumplen condenas de más de 10 años en diversas prisiones de Marruecos. Buena parte estos presos iban a Canarias pero fueron interceptados a su paso por aguas al sur de las islas por autoridades marroquíes.
Boubacar Séye, presidente de Horizons Sans Frontières, fue detenido el viernes 15 de enero de 2021 en el aeropuerto Blaise Diagne de Dakar por las autoridades senegalesas por “difundir noticias falsas”. Amnistía Internacional pidió su libertad. Se le acusaba de unos comentarios realizados en las columnas del periódico 'L'Observateur' el 27 de octubre de 2020, donde hablaba de la reciente ola migratoria que sale de las costas senegalesas hacia Europa. Al hablar de los fondos de la UE contra la migración irregular en Senegal, Séye denunció su mala gestión.
En 2021 fueron detenidos en Canarias 202 patrones de cayucos y a principios de 2024 se supo de la existencia de más de 400 acusaciones de la Fiscalía. El jurista Daniel Arencibia advierte que se está imputando este delito a malienses que llegan a las islas dirigiendo la embarcación porque también son migrantes irregulares sin la salvaguarda jurídica de que Mali está en guerra civil con penas de entre seis y ocho años de prisión cuando en el resto de España el fenómeno migratorio es diferente dado que el patrón intenta regresar a su lugar de origen.
La ONG senegalesa que pide la libertad de los patrones de cayucos en cárceles marroquíes señala que ha sido contactada por "por compatriotas residentes en Senegal o en la diáspora en relación con miembros de sus familias encarcelados en el Reino de Marruecos por delitos" y delitos vinculados a la emigración irregular con condenas superiores a 10 años de prisión en diferentes establecimientos penitenciarios de Marruecos. La ONG ha pedido el indulto real a Marruecos y ha pedido al presidente senegalés, Bassirou Faye, que interceda ante Mohamed VI.
Senegal se encuentra en periodo electoral y el primer ministro, Ousmane Sonko, ha propuesto una política de reciprocidad en materia de visados, subrayando que cualquier país que exija un visado para la entrada de senegaleses en su territorio debería, a su vez, someter a los senegaleses ciudadanos a requisitos similares. Sonko quiere iniciar un proceso de identificación de los extranjeros presentes en Senegal, incluidos los procedentes de países miembros de la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO). Aunque estos últimos se benefician del derecho de libre circulación dentro de la región.
Desde este 17 de noviembre la pesca europea en Senegal queda paralizada. La Unión Europea ha dicho que no está considerando renovar el acuerdo en este momento, lo que obligará a los barcos europeos a abandonar aguas senegalesas en esa fecha. Esta decisión marca un cambio importante en las relaciones entre ambas partes y se produce en un contexto de lucha intensificada contra la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (INDNR), un ámbito en el que la UE considera que los esfuerzos de Senegal siguen siendo insuficientes.
El 27 de mayo, la Comisión Europea designó a Senegal como país "no cooperante" en la lucha contra la pesca INDNR, citando varios años de discusiones sin avances notables, según la UE. Esta advertencia, que refleja una tolerancia cero por parte de la UE, impone exigencias estrictas a Senegal para que considere una renovación del acuerdo, en particular un refuerzo de los controles y las medidas de trazabilidad en el sector pesquero.
A partir del 17 de noviembre, los buques europeos deberán cesar sus actividades en aguas senegalesas, poniendo así fin a sus operaciones en esta zona. Como resultado, Senegal dejará de recibir la contribución financiera asociada a este acuerdo, lo que afectará a los ingresos procedentes de las licencias y al apoyo financiero de la UE al sector pesquero.
La industria pesquera emplea a más de 600.000 personas en el país y casi el 75% de las proteínas animales consumidas en Senegal provienen del pescado. Pero el 90 por ciento de las pesquerías del país están plenamente explotadas o corren el riesgo de colapsar, según datos compilados por la Fundación para la Justicia Ambiental (EJF) y las Naciones Unidas. El comercio marítimo ilegal le cuesta a África occidental casi 1.950 millones de euros en la cadena de valor del pescado y hace que los hogares pierdan 593 millones de dólares en ingresos al año.
La pesca INDNR "es uno de los flagelos que azota a nuestro sector", afirma Moustapha Ly, secretario general del Ministerio de Pesca y Economía Marítima, en un informe de 2021 de Senegal Black Rainbow. Moustapha Ly dijo que el país pierde al menos más de 252 millones de euros anualmente debido a la pesca INDNR. En la última década han proliferado las fábricas de harina y aceite de pescado de propiedad china. Las fábricas de harina de pescado pulverizan el pescado para obtener alimento para granjas de mariscos, como camarones, así como de cerdos, pollos y otros animales.
esnalar
17/11/2024 11:37
Están defendiendo su negocio en dos frentes. Por un lado el que tienen con los ilegales, y por otro, con los que les proporcionan esos ilegales.
takotapablogarcia
17/11/2024 12:16
El caladero senegales es territorio comanche hay más barcos piratas chinos por milla q peixe
MataNarcisos
17/11/2024 18:12
Sigan los ingresos de esa ONG, y se verá quien es el interesado de que a España llegue toda la inmigración posible, y así causar un colapso migratorio. Seguro que hay ingresos provenientes de algún lugar con secreto bancario.