Se podría discutir mucho sobre las causas del declive de la televisión pública, pero lo cierto es que este hecho es innegable. Rosa María Mateo tomó las riendas de RTVE hace dos años y, lejos de frenar este proceso, lo ha agudizado. Entre otras cosas, por las malas decisiones que ha adoptado su equipo durante este tiempo.
El principal canal de la corporación, La 1, cerrará junio con una audiencia que oscilará entre el 8,8 y el 8,9% de la cuota de pantalla. Es decir, será ligeramente superior a la del mismo mes del año pasado (8,7%), pero inferior a la de mayo (9,1%).
Hay un dato que evidencia la mala situación que vive este canal de televisión, otrora clara referencia para los españoles. En junio, terminó más días con una audiencia inferior al 8% que superior al 10%. El día 5 de ese mes, sin ir más lejos, ocupó la sexta posición en la lista de cadenas más vistas, según la información distribuida por Barlovento Comunicación a través de los registros de Kantar Media.
Todos estos datos se han registrado en un momento histórico sin precedentes para la televisión. Es decir, en mitad de una pandemia que ha impactado con fuerza en el negocio de los medios de comunicación y ha mermado de forma alarmante su recaudación publicitaria.
En este contexto, los grupos privados han aplicado recortes a sus parrillas y han abaratado su horario de máxima audiencia. El equipo de Rosa María Mateo, sin embargo, optó por mantener la emisión de Operación Triunfo y de MasterChef en junio. Pese a todo, su audiencia total mensual ha sido escasa.
Datos de audiencia de La 1
A día 30 de junio -en el momento de la redacción de esta información-, La 1 registraba un 8,9% de cuota de pantalla, frente al 15,4% de Telecinco, el 11,2% de Antena 3, el 6,9% de La Sexta y el 5,2% de Cuatro.
En resumidas cuentas, La 1 finalizará junio más cerca de Cuatro, que ostenta la quinta posición en audiencia, que de Telecinco, que finalizará como líder por 22º mes consecutivo.
Es cierto que la decadencia de la audiencia no se inició con Rosa María Mateo, sino que comenzó durante la 'gran recesión' económica, cuando el Gobierno dejó de ser capaz de aportar los 1.200 millones de euros anuales que fija la ley de financiación de RTVE para garantizar el cumplimento de su servicio a los ciudadanos.
Ahora bien, el actual equipo directivo no ha sido capaz de frenar la caída en picado de cuota de pantalla. Ni siquiera de mantener la audiencia de sus informativos, que actualmente son terceros, por detrás de los de Antena 3 y Telecinco.
En julio de 2018, es decir, el mes anterior a que Mateo tomara posesión de su cargo, el Grupo RTVE (La 1, La 2, Clan, Canal 24 Horas y Teledeporte) logró el 16,7% de cuota de pantalla. El pasado mayo, el 14,9%. Eso quiere decir que Telecinco, un único canal, consiguió una mayor audiencia (15,5%) que todas las cadenas de la televisión pública.
Datos históricos de audiencia de TVE
La 1 comenzó la década de 1990 con una audiencia media del 58,6%. Al inicio del nuevo siglo, tras la ganancia de fuerza de los grupos privados, tenía un 25,2%. En 2010, el 18,6% de media; y, en el sexto mes de 2020, el 8,9%. Rosa María Mateo la cogió con el 10,3% y, en este tiempo, ha perdido el 15% de la cuota.
Los grupos parlamentarios decidirán en las próximas semanas quién será el sustituto de la administradora única provisional de RTVE. Lo harán tras resolver un concurso que ha estado paralizado durante más de un año.
Los letrados de la Cámara resolvieron hace unos días las dudas que se habían planteado sobre la resolución de este procedimiento y, a partir de ahora, los partidos deberán consensuar a los candidatos a los 10 puestos en el Consejo de Administración y votarlos en el Congreso y en el Senado.
Tal y como adelantó este periódico, el Gobierno buscará un pacto alrededor de la figura de Isabel Raventós, antigua trabajadora de RTVE que tiene una amplia experiencia en la gestión audiovisual, dentro del sector privado. La pregunta que se plantea, a partir de ahora, es cuándo se producirá el cambio.
