El Volkswagen Tiguan 2016 llega a los concesionarios anunciando un precio de partida de 29.560 euros en su versión dieésel TDI de 150 CV, una nueva generación del exitoso SUV que crece en todos los sentidos para posicionarse dentro del segmento un escalón por encima de donde estaba actualmente, un segmento en pleno crecimiento y al que se incorporan cada año nuevos modelos. Y es que la llegada de muchos de ellos en los últimos años dejaba al Tiguan nacido en 2008 ligeramente fuera de juego, algo que se corrige ahora con la presentación de esta segunda generación, que nada comparte técnicamente hablando con la primera.

Utiliza, de entrada, una nueva plataforma con superiores dimensiones pero un peso más bajo incluso que el actual Tiguan, unos 50 kilos más ligero de media. Con 8 centímetros más de distancia entre ejes, el Tiguan 2016 es casi 5 centímetros más largo, alcanzando ahora los 4,49 metros, mientras que gana algo de anchura y pierde altura -1,84 y 1,63 metros respectivamente- para mostrar unas proporciones más dinámicas, acordes además a un nuevo diseño que refleja también ese mayor carácter dinámico que quiere ahora transmitir el nuevo Tiguan. Mantendrá aun así la posibilidad de elegir entre una versión off-road con un frontal específico que aumenta el ángulo de ataque de 16 a 24 grados o una R-Line más de asfalto con cambios en la carrocería y llantas de 19 o 20 pulgadas.

A pesar de la menor altura de la carrocería y de situar los asientos 8 milímetros más altos, la altura en las plazas delanteras, según Volkswagen, es ligeramente mayor que en el modelo actual. En las plazas traseras, a pesar del notable aumento de batalla, se mejora el espacio para las piernas en poco más de 2 centímetros, manteniendo la posibilidad de regular longitudinalmente la banqueta y variar la inclinación de los respaldos. Eso sí, se ha aprovechao para mejorar uno de los aspectos menos brillantes del anterior Tiguan, la capacidad del maletero, que llega hasta los 615 litros en vez de 470. Sin duda, una mejora muy a tener en cuenta y demandada desde siempre por la mayoría de los clientes.

En cuanto a equipamiento, tiene de serie frenado de emergencia automático en ciudad con detección de obstáculos y peatones, asistente de mantenimiento automático dentro del carril, frenado automático tras una colisión o un capó que se eleva unos centímetros en caso de atropello para evitar que el cuerpo golpee con las piezas indeformables que hay bajo el capó. Ya según versiones, están disponibles otros sistemas de seguridad o ayuda a la conducción como el detector de cansancio, el programador de velocidad activo, el aviso de vehículos en el ángulo muerto de los retrovisores, los faros de ledes o el sistema «Area View» de vista cenital que proporcionan varias cámaras. El cuadro de instrumentos puede ser, como en el Passat actual, una pantalla de 12,3" configurable.

La gama de motores contempla versiones entre 115 y 240 CV de potencia, de los que tres son de gasolina —125, 150 y 180 CV— y cuatro diésel —115, 150, 190 y 240 CV—, además de una novedosa versión híbrida que Volkswagen ha anticipado en forma de prototipo, el Tiguan GTE, con 218 CV y una autonomía en modo eléctrico de 50 kilómetros.

Las versiones de 115 y 125 CV son de tracción delantera, las de 150 pueden ser delantera o total 4Motion y el resto son siempre 4Motion. Este sistema incluye ahora nuevo mando llamado ‘4Motion Active Control’ que permite seleccionar entre cuatro programas posibles —carretera, nieve, off-road y off-road personalizado— en función del tipo de terreno. Todos los 4Motion tienen además una altura libre al suelo superior en 20 milímetros a las versiones de tracción delantera.

En estos primeros meses de lanzamiento, la gama disponible contempla el 2.0 TDI de 150 CV con cambio manual de 6 velocidades o el DSG de 7 velocidades opcional y, en gasolina, el 2.0 TSI de 180 CV con cambio DSG de serie, ambos con tracción delantera o total 4Motion.

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