Vaya por delante que me parece positivo intensificar las relaciones políticas con Cuba, (no sólo con el gobierno dictatorial cubano) a pesar de que el presidente del Gobierno tenga que pagar el peaje de tener que saludar al sanguinario Raúl Castro. Él es quien realmente manda en Cuba.
Lo criticable es el coste que, para los contribuyentes españoles, tiene cada foto de los políticos españoles, sea Margallo, Dastis o ahora Borrel-Sánchez.
Borrel no debe estar muy bien informado por sus servicios del Ministerio (o nos engaña y se cree que somos tontos) y se pregunta:"¿Para qué sirve esta incomunicación, cuando todo el mundo va; qué sentido tiene que nosotros, que tenemos relaciones históricas culturales y humanas tan fuertes con esta isla, no hayamos pasado por allí ni tengamos nada que decir ni nada que aportar?".
Sr. Borrel, los españoles tenemos mucho que decir a los Castro y a los cubanos. Lo llevamos diciendo desde el embajador Lojendio el 20 de enero de 1960.
"Durante el gobierno de Rajoy, España ha liderado una condonación internacional de deuda de casi 8.000 millones de euros, de modo que la dictadura de Raúl Castro está pudiendo obtener nuevos créditos para mantener el mismo sistema improductivo y dictatorial"
¿Nada que aportar?
Después de China y Venezuela, a finales de 2016, éramos el tercer proveedor de Cuba aunque los datos de 2017 indican que ya somos el segundo. España siempre se mantiene como el primer proveedor de la UE.
Por si fuera poco, durante el gobierno de Rajoy, España ha liderado una condonación internacional de deuda de casi 8.000 millones de euros, de modo que la dictadura de Raúl Castro está pudiendo obtener nuevos créditos para mantener el mismo sistema improductivo y dictatorial. A España le ha costado 1.500 millones de euros de los contribuyentes y un aplazamiento de una cantidad similar en 18 años. Suma y sigue.
Por todo ello prepárense. Trescientos empresarios acompañarán a Sánchez. Muchos de ellos encantados de que el contribuyente español siga "aportando" al gobierno de Cuba por medio de los seguros de exportación que les abonamos los españoles a esos "empresarios" cuando envían mercancías a Cuba y no cobran del gobierno cubano.
Es decir, nunca.
