La sociedad evoluciona pero parece que seguimos igual. Ni una mujer opta a la presidencia del gobierno en las próximas elecciones y muy pocas han conseguido ocupar la presidencia de las comunidades autónomas. Y por si nos faltaba algo, a las nuevas políticas las juzgamos más por su atractivo que por su valía. ¿Hay alguna esperanza para acabar con el sexismo reinante en la sociedad? ¿No va siendo hora de adaptarnos a los tiempos que corren? Hoy, famosas contra la discriminación.