La nueva dirección de Paradores prepara un plan de viabilidad que frenará la expansión de la marca a partir de junio. Las últimas inauguraciones serán las del Parador de Lorca y el de Cádiz. Los de Morella (Castellón), Muxía (A Coruña), Corias (Asturias), Veruela (Zaragoza) y el de Ibiza (en las Islas Baleares) se caerán del presupuesto pese a estar ya aprobados y pendientes de adjudicación. Los de Villablino (León), Estella (Navarra), Badajoz, Lleida, Molina de Aragón (Guadalajara), Béjar (Salamanca) y Alcalá de la Real (Jaén) se quedan, de momento, en el tintero.