ASAC Comunicaciones es una de las empresas vinculadas al ‘caso Marea’. Su fundador, Maximino Fernández, reconoció en abril de 2016 que, a través de esta sociedad, facturó obras al Principado de Asturias que no se hicieron. La Agencia EFE asegura que esta consultora informática fue contratada por presentar la oferta más económica, en un concurso público al que se presentaron seis participantes.