Jamie Dimon, el CEO de JPMorgan Chase, el mayor banco americano y su posible retirada a corto o medio plazo puede influir de manera fundamental en el valor. El carisma del que está considerado como el mejor consejero delegado de EEUU podría costarle muy caro a las acciones de la entidad financiera. En concreto, las firmas cuantifican ese coste en precio entre un 10 y un 15% de la caída del valor