El Gobierno, el CSN y la patronal Unesa han elaborado un informe sobre la seguridad nuclear en España, que ha sido enviado al supervisor mundial de la materia, la OIEA, en el que se ocultan de forma deliberada los graves problemas de los terrenos en los que se ubicará el cementerio nuclear de residuos y su polémica autorización. El ATC aparece mencionado sólo una vez en el documento, de 202 páginas.

El Ministerio de Industria ha iniciado la fase de consultas a las Administraciones públicas afectadas y a las personas interesadas en el plan de Seabird Exploration, pero no se ha abierto el proceso de información pública que permite presentar alegaciones a cualquier ciudadano porque da por bueno el correspondiente a su proyecto anterior, archivado por un defecto formal. Entidades critican que el plan pueda saltarse este paso al haberse producido importantes cambios en la protección ambiental. 

El ministro de Industria tiene más que cabreados a los capos de las televisiones. Su gestión sobre los cambios en la TDT pasará a los anales del despropósito. Tampoco hablan bien de él quienes han padecido su reforma energética y su recorte a las renovables. Por no hablar, claro está, del 'caso Castor'...