Hay que asegurar la independencia de los jueces frente a presiones externas o intereses espurios, lo que no se refiere solo a las injerencias del Poder Ejecutivo, sino también a la prensa o la opinión pública del momento

Como la jungla del CIS es muy pequeña para dos partidos de centro-derecha, mejor defenestrar en lugar de convivir. Eso fue lo que hizo Albert Rivera esta semana: pulir la cubertería para merendarse a Rajoy, mientras este se desangraba, a la deriva, cual náufrago en un mar infestado de tiburones