La Junta de la Reserva Federal (Fed) ha concluido la segunda ronda de sus test de estrés a la banca y por primera vez, desde 2011, no se ha opuesto a ninguno de los planes de retribución de capital de las entidades participantes dando luz verde a sus planes de pagos de dividendos y recompra de acciones, a excepción de Capital One, que los ha aprobado de manera condicional.