Hay cosas imposibles de olvidar. En este caso toda la canción lo es, pero el principio, los primeros segundos de ‘Like a rolling stone’, anticipan algo que durante seis minutos y nueve segundos es capaz de cambiar la vida de una persona. Uno puede haber escuchado esta canción miles y miles de veces, pero su magia reside en parecer joven, nueva, y dispuesta a ser amada cada vez que se vuelve a enfrentar a ella.