¡Ah, cuánta gente estará de acuerdo con el título que encabeza estas líneas! Y, lo que es más divertido, la confluencia de opiniones respecto del aserto tendrá motivos radicalmente distintos. Para muchos, ya lo saben, no es que se equivoque: Don Sant

Una de las consecuencias de la pandemia fue la “normalización” -disculpen la neolengua- del trabajo en línea. Según la persona y el caso, esto ha supuesto una gran oportunidad o una maldición. En el mío, y sobre el papel, me permite ir a mi aire. L