Reino Unido, Italia y Japón han acordado este viernes el Programa Aéreo de Combate Global (GCAP por sus siglas en inglés) en materia de defensa que les permite desarrollar un plan militar para construir aviones de combate de nueva generación. "El GCAP acelerará nuestra capacidad militar avanzada y nuestra ventaja tecnológica; profundizará nuestra cooperación en materia de defensa, la colaboración científica y tecnológica, las cadenas de suministro integradas y reforzará aún más nuestra base industrial de defensa", reza un comunicado conjunto, que recoge Europa Press.
Los primeros ministros de Londres, Roma y Tokio -Rishi Sunak, Giorgia Meloni y Fumio Kishida, respectivamente- han sostenido que se comprometen a defender un orden internacional basado en normas, libre y abierto, señalando que son características "más importantes que nunca" por el "aumento" de "las amenazas y agresiones".
Este plan busca, además, beneficios económicos, generando empleo, atrayendo inversiones y generando procesos de fabricación avanzados. "Trabajando juntos en un espíritu de asociación igualitaria, compartimos los gastos y los beneficios de esta inversión en nuestra gente y tecnologías", continúa la misiva. "Y lo que es más importante, el programa apoyará la capacidad de soberanía de estos tres países de para diseñar, suministrar y modernizar capacidades aéreas de combate de vanguardia", añade el documento.
"La próxima generación de aviones de combate que diseñamos nos protegerá a nosotros y a nuestros aliados en todo el mundo al aprovechar la fuerza de nuestra industria de defensa líder en el mundo, creando empleos y salvando vidas", ha indicado Sunak, según recoge la cadena BBC. El objetivo de Downing Street es que los aviones, denominados Tempest en Reino Unido, surquen los cielos en 2035 y sucedan al Typhoon de la RAF, informa la citada cadena.
El objetivo es que las aeronaves desarrolladas en el marco del GCAP cuenten con capacidades mejoradas. Aviones sin tripulación, sensores avanzados, armas de última generación...