“El castigo en los delitos patrimoniales no se justifica por ‘quedarse con las cosas del otro’, sino por ‘quitarle a otro las cosas’”, argumenta con aplastante lógica el Supremo. No es una cuestión de pacificación, sino de estricta interpretación del derecho

Este verano va a ser cálido. No hace falta estar atento a la meteorología. Si la clase política no se toma vacaciones es señal inequívoca de una revolución en las costumbres o quizá volver a imágenes del pasado. “Hacer de